El consejero delegado de Repsol considera que la Ley de Clima es “poco ética” por prohibir la extracción de gas o ‘fracking’
MADRID, 14 (EUROPA PRESS)
El consejero delegado de Repsol, Josu Jon Imaz, ha defendido la idea de apostar por una transición energética que evite los “radicalismos ideológicos” y que otorgue un mayor papel protagonista al gas natural y al petróleo.
Ha sido en una breve entrevista en ‘Cinco Días’, donde el consejero delegado de la multienergética ha dado sus impresiones sobre los elementos que considera clave en esta llamada transición hacia nuevas fuentes de energías más limpias.
Lo primero que ha dejado claro Imaz es que rechaza el concepto de “revolución energética” si esto supone una ruptura entre el modelo anterior y el nuevo. “Si queremos hacer una revolución nos vamos a equivocar de cuajo. Y en Europa creo que estamos empezando a corregir el tiro, pero ya nos hemos equivocado bastante en materia energética”, ha aseverado en su intervención.
El CEO de Repsol ha justificado esta postura porque si se observa la demanda, la energía renovable representa actualmente en el mundo apenas el 11,7% de la energía total, frente al resto que procede de fuentes fósiles.
En esta línea, ha subrayado que la energía “no puede estar sujeta a la política climática”, en referencia a la descarbonización. Aquí ha explicado que si bien considera este elemento un componente “muy importante”, también hay que poner “en pie de igualdad” la seguridad de suministro.
“Nos olvidamos en Europa de la seguridad de suministro y creamos dependencia con Rusia y hemos pagado el pato”, ha continuado explicando Imaz, para concretar que su apuesta es por una descarbonización que garantice el suministro y una energía “barata” y “asequible”.
LA ELECTRIFICACIÓN, EL MAYOR EMISOR DE CO2
Y es que el consejero delegado de Repsol ha instado a “matar mantras” energéticos, sobre todo en lo que concierne a la electrificación, sector en el que Repsol se encuentra “parcialmente”.
Sobre si la electrificación es la “solución” en el contexto de una transición energética, Imaz ha recordado que es precisamente la electricidad la mayor emisora de dióxido de carbono (CO2) del mundo, básicamente porque buena parte se genera con carbón y se llegan a emitir hasta 10.000 millones de toneladas de CO2 al año.
“Esto es mucho más de lo que emite todo el transporte junto (…) tenemos que empezar a romper un poco determinados mantras”, ha subrayado durante su discurso.
En este sentido, Imaz considera que España necesita más gas natural, y a tenor de esto ha aprovechado para referirse a la Ley del Clima de 2021, a la que ha catalogado como “poco ética” por prohibir explorar y producir gas natural.
“Si pudiésemos desplazar todo el carbón en el mundo que genera electricidad y producir esa electricidad con gas natural estaríamos eliminando más CO2 que todo lo que producen todos los camiones y coches en el mundo juntos hoy”, ha explicado.
EL PETRÓLEO PODRÁ LLEGAR A SU PICO ENTRE 2030 Y 2040
En lo relativo al papel del petróleo en la transición energética, Imaz ha advertido que este tendrá un rol importante, ya que seguirá siendo necesario en el futuro para la producción de determinados bienes y componentes.
Así, sobre la demanda de petróleo, el directivo considera que es posible que esta llegue a un pico entre el 2030 y el 2040, pero aún así y en un mundo “absolutamente descarbonizado” se seguirá necesitando “mucho petróleo”.
“La moqueta que estoy pisando, la silla en la que estoy sentado, el micrófono que me cuelga, están hechos con petróleo. No hay más transición energética sin petróleo”, ha ilustrado el consejero delegado en su intervención.
Por estos motivos, ha puesto de relieve la importancia de descarbonizar el petróleo y no de eliminarlo. “Más transición energética significa más petróleo”, ha concluido Imaz.
- Te recomendamos -