MADRID, 24 (EUROPA PRESS)
La Federación Internacional de Asociaciones de Lucha contra la Lepra (ILEP) ha concluido este viernes en Valencia su asamblea anual con la recomendación a gobiernos e instituciones sanitarias de formar nuevos profesionales especializados en la prevención, el diagnóstico y el tratamiento de la lepra
La comisión técnica de ILEP ha constatado que el envejecimiento de los profesionales actuales hace necesario garantizar el relevo generacional tanto del personal médico y enfermero de los sistemas nacionales de salud como de los colaboradores en el terreno, personal paramédico y voluntariado.
El asesor técnico de ILEP, Paul Saunderson, ha considerado que la formación de esta nueva generación de profesionales es un reto fundamental para afrontar los otros dos desafíos que surgirán en la lucha contra la lepra durante los próximos años: por un lado, la inminente interrupción de la transmisión de la enfermedad en algunos países; por otro, la gran variabilidad de la incidencia de la enfermedad entre diferentes zonas de un mismo país.
Respecto al primer aspecto, los especialistas de la comisión técnica de ILEP han estimado que, en los próximos años, países que en la actualidad presentan un escaso número de nuevos casos de la enfermedad en niños y niñas de hasta catorce años -como Marruecos, Camboya, Vietnam y Las Maldivas- pasarán a no detectar ninguno, lo que indicará la interrupción de la transmisión comunitaria.
En cuanto al segundo, los técnicos de la federación estiman que lo mismo puede ocurrir en zonas concretas de países con una alta incidencia de la enfermedad, como India y Brasil. Saunderson ha alertado de que nada de ello debería suponer la finalización de los programas en dichos espacios, sino que hará necesario replantear las estrategias y reorientarlas al mantenimiento de la vigilancia -ante posibles nuevos casos como consecuencia de migraciones y de incubaciones ya iniciadas-, de la lucha contra el estigma y de los servicios de atención a la discapacidades en casos antiguos.
Por otra parte, la asamblea ha elegido tres proyectos innovadores a desarrollar durante los próximos años relacionados con el diagnóstico temprano de la enfermedad, el tratamiento de las úlceras que genera y la reducción del estigma que causa quienes la padecen.
El encuentro, organizado por la fundación Fontilles, ha reunido durante cuatro días, alrededor de 50 representantes de las catorce entidades miembro -originarias de Alemania, Bélgica, Canadá, España, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón, Países Bajos, Reino Unido y Suiza- que han intercambiado sus experiencias en la lucha contra la lepra, compartido las buenas prácticas desarrolladas durante el último año y debatido sobre los principales retos en el tratamiento de la enfermedad.
La enfermedad de la lepra registró 140.594 nuevos casos en el mundo en 2021, último año del que existe información. La cifra supuso un aumento del 10 por ciento respecto a los 128.405 casos localizados en 2020 y estuvo acompañada por un incremento de las detecciones en niños y niñas y con discapacidades asociadas.
El número de personas afectadas que presentaban discapacidades visibles en el momento de la detección aumentó en un 18 por ciento, al pasar de 7.198 en 2020 a 8.492 en 2021, lo que supuso el 6 por ciento de las nuevas detecciones y situó la tasa de discapacidad en 1,1 casos por millón de habitantes. A su vez, los nuevos casos detectados en niños y niñas menores de 15 años crecieron en un 4,9 por ciento, de 8.629 a 9.052.
- Te recomendamos -