MADRID, 20 (EUROPA PRESS)
Hino Motors, la división de vehículos industriales de Toyota, ha sido condenada en Estados Unidos (EE.UU.) a pagar multas por un valor de más de 1.600 millones de dólares (1.475 millones de euros) por fraude en las emisiones de gases de escape.
En concreto, según ha informado el departamento de Justicia estadounidense este jueves, el juez Mark A. Goldsmith, del distrito Este de Michigan, ha aceptado la declaración de culpabilidad de Hino Motors, acusada de haber participado en una “conspiración criminal de varios años para defraudar al Gobierno de los EE.UU., así como a los consumidores estadounidenses e introducir ilegalmente mercancías en el país”.
Así, el Juez Goldsmith ha condenado a la filial del fabricante automovilístico japonés a pagar una multa penal de 521,76 millones de dólares (481,19 millones de euros), a cumplir un período de libertad condicional de cinco años -durante el cual se le prohíbe importar a EE.UU. cualquier motor diésel que haya fabricado- y a implantar un programa integral de cumplimiento y ética y una estructura de información.
Asimismo, el tribunal también ha dictado una sentencia de decomiso de 1.087 millones de dólares contra la empresa.
ALTERACIÓN REGULAR DE LOS DATOS DE LAS PRUEBAS DE EMISIONES
Según los registros judiciales, entre 2010 y 2019 los ingenieros de Hino Motors presentaron e hicieron que se presentaran solicitudes falsas de aprobaciones de certificación de motores en violación de la Ley Federal de Aire Limpio. Igualmente, dichos ingenieros alteraron regularmente los datos de las pruebas de emisiones, realizaron pruebas de manera incorrecta y proporcionaron datos sin realizar pruebas subyacentes.
Así, tal y como detallan los registros, los ingenieros también presentaron datos fraudulentos de pruebas de emisiones de dióxido de carbono, lo que dio lugar a que se calcularan valores falsos de consumo de combustible para sus motores, al tiempo que tampoco revelaron funciones de software que podían afectar negativamente a los sistemas de control de emisiones de los motores.
Como resultado del fraude, Hino Motors, importó y vendió más de 105.000 motores no conformes entre 2010 y 2022, los cuales se instalaron principalmente en camiones pesados fabricados y vendidos por Hino en todo el país.
El Fiscal General Adjunto en funciones de la División de Medio Ambiente y Recursos Naturales del departamento de Justicia, Adam Gustafson, ha declarado que la división de la compañía asiática “importó ilegalmente más de 105.000 motores que no cumplían con las normas de emisiones de Estados Unidos y mintió sobre lo que estaba haciendo”.
“La conducta delictiva de Hino le dio una ventaja comercial injusta sobre otras empresas respetuosas con la ley, incluidas empresas estadounidenses, y generó más de 1.000 millones de dólares (922 millones de euros) de beneficios brutos”, ha explicado el fiscal.
Por último, la fiscal federal en funciones del Distrito Este de Michigan, Julie Beck, ha detallado que su oficina se mantiene “firme en su compromiso de responsabilizar a los actores corporativos cuando mienten a los reguladores gubernamentales, introducen ilícitamente mercancías en el condado y luego las venden fraudulentamente a los consumidores estadounidenses”.
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