MADRID, 7 (EUROPA PRESS)
El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, ha afirmado que el conflicto en la Franja de Gaza es “una herida abierta en la conciencia colectiva” y ha reclamado un alto el fuego “inmediato” para aliviar la situación de la población civil, “especialmente alarmado” por las consecuencias que pueda acarrear la ofensiva militar israelí sobre la localidad de Rafá.
En esta zona, situada en el sur de la Franja de Gaza, se agolpan “cientos de miles” de palestinos desplazados que han llegado allí en una “búsqueda desesperada” de una mínima seguridad. Guterres, que ha expuesto su ‘hoja de ruta’ para 2024 ante la Asamblea General de la ONU, teme que un avance israelí sobre Rafá empeore aún más las cosas.
“Esta acción aumentaría de manera exponencial lo que ya es una pesadilla humanitaria, con imprevisibles consecuencias para la región”, ha advertido el secretario general de la ONU, un día después de que el responsable de la organización para Asuntos Humanitarios, Martin Griffiths, advirtiese de que un avance sobre Rafá podría constituir crímenes de guerra.
Guterres ha subrayado que “nada justifica los horribles ataques terroristas” perpetrados el 7 de octubre por milicianos de Hamás, pero ha insistido además en que tampoco hay excusas para el “castigo colectivo” que estaría infligiendo Israel sobre la población palestina.
Para Guterres, “es momento de un alto el fuego humanitario inmediato” y de la liberación “inmediata e incondicional” de todos los rehenes que siguen en manos de Hamás, un paso previo, ha añadido, a que haya acciones “irreversibles” que permitan resolver los problemas de fondo.
En este sentido, ha abogado de nuevo por la “solución de dos Estados”, que implicaría la creación de un Estado palestino.
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