MADRID, 3 (EUROPA PRESS)
El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, ha afirmado este miércoles ante el Consejo de Seguridad de la ONU que los ‘cascos azules’ de la misión en Líbano, la FINUL, siguen en sus puestos “pese a la petición de Israel” de que se retiren en el marco de la invasión iniciada esta semana, alegando que el objetivo es el partido-milicia chií libanés Hezbolá.
“Ayer, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) llevaron a cabo lo que declararon ‘incursiones limitadas en el sur de Líbano’. Las fuerzas de mantenimiento de paz de la FINUL permanecen en sus puestos, y la bandera de la ONU sigue ondeando a pesar de la petición de Israel de que se retire. Reitero nuestro profundo agradecimiento a los miembros militares y civiles de nuestra fuerza de mantenimiento de paz y a los países que aportan contingentes”, ha declarado.
Posteriormente, el portavoz de Guterres, Stéphane Dujarric, ha explicado en una rueda de prensa que las FDI “habían pedido a la FINUL que abandonara varias posiciones cerca de la Línea Azul, diciendo que era en interés de la seguridad de los pacificadores”, pero que se ha tomado la decisión “tanto operativa como política de permanecer”. “Seguiremos estando, al tiempo que evaluamos nuestra postura y la seguridad de las fuerzas de mantenimiento de la paz, diría, cada hora”, ha agregado.
Dujarric, que ha subrayado que a pesar de las evaluaciones sobre la seguridad de los pacificadores “estar en medio de una zona de conflicto es peligroso, ha sostenido que “siguen siendo una fuerza de disuasión y proporcionan un marco de comunicaciones crítico” en el que mantienen el contacto tanto con las FDI como con el Ejército libanés, mientras que también “informan de lo que está ocurriendo”.
En la víspera, la FINUL –integrada por unos 10.500 soldados, de los que unos 650 son españoles– suspendió sus actividades en el sur de Líbano por el incremento de la intensidad de los combates y antes de que se confirmara una intervención terrestre. “Se mantienen en posición en la zona de responsabilidad de la misión, aunque la intensidad de los combates impide sus movimientos y su capacidad para llevar a cabo sus tareas”, señaló Dujarric.
El repunte de las tensiones en la región se ha visto materializado por el inicio de una nueva invasión de Líbano por parte de Israel contra el partido-milicia chií Hezbolá durante la madrugada del martes y que fue seguido por un masivo ataque con misiles por parte de Irán contra territorio israelí, una espiral de hostilidades iniciada tras los ataques del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) del 7 de octubre de 2023, que dejó 1.200 muertos y más de 240 rehenes, y la posterior ofensiva israelí sobre la Franja de Gaza, que se ha saldado ya con casi 41.700 palestinos muertos.
- Te recomendamos -