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Greenpeace propone la implementación de un abono de transporte único para todo el territorio español, sugiriendo que esto sería posible a través de la aplicación de un impuesto a la aviación

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MADRID, 19 (EUROPA PRESS)

Greenpeace asegura que es viable implantar en España un abono único de transporte “asequible y accesible”, con una tarifa plana común para todo el país y cuya financiación dependería de un nuevo impuesto a los combustibles de aviación con el que la ONG estima que se podría recaudar casi 5.000 millones de euros.

La ONG ha publicado el informe ‘Viabilidad técnica y económica de un abono único de transporte en todo el Estado español’ en el que fija en casos como Alemania y Austria donde se han puesto en marcha este tipo de abonos.

El estudio analiza la posibilidad de implantar este tipo de tarjeta para que sea válida en todo el país, sin restricciones geográficas, horarias o de tipo de transporte público. Este abono único permanente permitiría, según Greenpeace, reducir la congestión del tráfico, disminuir las emisiones de CO2 y mejorar y facilitar la movilidad sostenible en el país, lo que generaría evidentes beneficios ambientales y sociales.

En concreto, el trabajo concluye que la reducción de la tarifa a través de un abono medio permite aumentar la demanda, a la vez que se generan beneficios en cuanto a términos económicos en rebajas para las familias usuarias de este abono, acompañado de una reducción de la contaminación por emisión de CO2.

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Greenpeace incluso ha puesto nombre a este abono, ‘T-lleva’, que por 1 euro al día serviría a los usuarios para autobús, trenes, tranvías, medios de transporte público, fomentando así un cambio hacia medios de transporte más respetuosos con el medio ambiente.

Para la presentación de esta iniciativa se ha lanzado también un vídeo en colaboración con la plataforma de divulgación científica y medioambiental Hope para explicar la propuesta.

El informe de Greenpeace analiza los efectos de la implantación de los descuentos y abonos puestos en marcha por el Gobierno desde septiembre de 2022 en el transporte y que han llevado a un incremento medio de viajeros entre los meses de septiembre de 2022 y mayo de 2023 de un 23,53%.

En total, la cifra supone 56,1 millones de viajeros adicionales desde el inicio de las bonificaciones y un ahorro estimado de unas 300 toneladas de CO2 al día.

La responsable de movilidad de Greenpeace, Cristina Arjona, considera que ahora es necesario tomar iniciativas para que la experiencia piloto de los descuentos actuales sean permanentes.

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“La nueva legislatura y de cara a 2024 es necesario que se tomen decisiones sobre la continuidad de estos descuentos”, ha reclamado Arjona que expone que la estrategia de fomento del transporte asequible conseguida con los descuentos y abonos de transporte en este último año “han demostrado que un transporte público asequible es atractivo para la ciudadanía a nivel social y medioambiental”.

En cuanto a la financiación del coste estimado de unos 2.000 millones de euros anuales, la fórmula para Greenpeace pasa por poner en marcha un tipo de IVA reducido sobre el transporte terrestre de viajeros; eliminar las exenciones de los modos más contaminantes; un tributo de los combustibles de la aviación que permitiría recaudar casi 5.000 millones de euros o el aumento general de la fiscalidad de los hidrocarburos.

Con esta fiscalidad verde, el informe de Greenpeace supondría una reducción de entre 5,3% y un 12,9% de las emisiones de CO2, a la vez que se aumentaría la recaudación.

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“El dinero para un abono único de transporte está ahí, pero hasta ahora se ha gastado en subsidios que dañan el clima”, ha afirmado Arjona.

Greenpeace insiste en la necesidad de acompañar estos abonos con mejoras en la oferta y servicios de transporte, que garanticen un servicio de calidad y con capacidad de absorber la demanda.

Para ello, la ONG apunta que serán necesarias nuevas inversiones como la adquisición de nuevos vehículos, la ampliación de las rutas y frecuencias, la mejora de las infraestructuras de transporte y la implementación de tecnologías avanzadas de gestión y billetaje.

Con este conjunto de medidas se garantizará la sostenibilidad económica del abono único de transporte, sino que también contribuirán a la transición hacia una movilidad más ecológica y sostenible en toda España.

Con motivo de la Semana Europea de la Movilidad, Greenpeace reclama a los responsables políticos que cambien las prioridades de financiación hacia el transporte público para garantizar la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero y las necesidades de movilidad de las personas.


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