BILBAO, 28 (EUROPA PRESS)
El Gobierno Vasco realizará este martes, en su primera reunión de este nuevo curso político, un análisis de la situación con el tema de la crisis económica y de la energía “como referentes”, según han informado a Europa Press fuentes del Ejecutivo.
Como es habitual cada año, el Consejo de Gobierno arrancará el nuevo curso político en el Palacio Miramar de Donostia-San Sebastián, tras reincorporarse al trabajo todos los miembros del Ejecutivo después de las vacaciones estivales.
La llegada mañana de los consejeros y las autoridades de Gipuzkoa al Palacio Miramar está prevista para las 10.00 horas. Un cuarto de hora después, hará su entrada el Lehendakari, Iñigo Urkullu, y se realizará la foto de familia.
Ya a las 10.30 horas, comenzará la reunión del Gobierno y, posteriormente, a las 12.00 horas, está prevista la comparecencia pública del Lehendakari para explicar los asuntos tratados en el primer encuentro formal con sus consejeros.
En esta primera cita tras el verano, el Ejecutivo realizará un análisis de la situación poltítica y ecónomica, “con el tema de la crisis y de la energía como referentes”.
El Gobierno Vasco tendrá que abordar en este nuevo curso político los retos que se presentan en un contexto en el que, tal como ha destacado hace unos días su portavoz, Bingen Zupiria, la covid todavía tiene efectos en el suministro de materiales y en los precios de los bienes, lo que está provocando el aumento de la inflación, todo ello agravado por el conflicto bélico en Ucrania por la invasión rusa, y los problemas en el suministro energético.
En todo caso, Zupiria aseguró que Euskadi se encuentra en una “buena situación” para hacer frente a “las incertidumbres” que se presentan para este próximo otoño-invierno, y precisó que el Lehendakari ha marcado “como prioridad” a los integrantes de su Gobierno “estar muy pendientes de lo que está sucediendo alrededor para responder adecuadamente” en Euskadi. “Hay que ser realistas y estar preparados para lo que venga”, afirmó.
También el consejero de Economía y Hacienda, Pedro Azpiazu, alertó el pasado 22 de agosto de “la gran incertidumbre” que se presenta en otoño, pero aseguró que la situación económica vasca “es buena”. En la misma línea se pronunció la consejera de Desarrollo económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente, Arantxa Tapia, al admitir que vienen tiempos “duros”, aunque consideró que la industria vasca sabrá “hacer frente a las situaciones” que se presentarán.
Mientras Europa ya aborda medidas de ahorro energético y a la espera de que España remita a la UE su Plan de Contingencia, Euskadi completa su borrador de medidas, con las aportaciones realizadas por instituciones, organizaciones empresariales e industriales, así como los sectores implicados, para enviarlo al Ejecutivo de Pedro Sánchez.
La propia vicepresidenta tercera, Teresa Ribera, consideró que el Plan vasco es “sólido” y “positivo”, y se comprometió a incluirlo en el documento que el Gobierno español hará llegar a la Comisión Europea.
En cuanto a la inflación, una de las cuestiones más preocupantes, Iñigo Urkullu ya anunció el 28 de julio un paquete de medidas fiscales, con un coste estimado de 250 millones para las instituciones vascas, entre las que destaca la deflactación del 4% en todos los tramos de la tarifa del IRPF, que se suma a la del 1,5% aprobada a principios de año.
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