MADRID, 04 (SERVIMEDIA)
El presidente de la Confederación Española de organizaciones Empresariales (CEOE), Antonio Garamendi, defendió este viernes la fiscalidad que se impulsa desde la Comunidad de Madrid pues, a su juicio, contribuye a mejorar la economía. “A mí, los callos a la madrileña… me gustan más los callos a la vizcaína, pero los impuestos a la madrileña me parecen más interesantes”, ironizó.
Así se expresó Garamendi en el acto del 30 aniversario de Intereconomía, donde apuntó que, para avanzar en productividad y empleo reclamó que “se nos escuche un poco”, en referencia a las empresas. Al tiempo, pidió una política tributaria más adecuada que se parezca más a la de la Comunidad de Madrid.
A su juicio, “se demuestra” que funciona mejor la aplicación de “más bases imponibles” porque la economía sumergida en Madrid “es menor” y “la realidad” es que en las regiones con tributos más altos es “mayor”. Igualmente, urgió a apostar por una mayor eficiencia en el uso del dinero público para administrar mejor los impuestos.
En relación con la negociación sobre la reducción de la jornada laboral, Garamendi se abrió a trabajar menos horas en determinados sectores en los que la tecnología impacta más directamente, pero dijo que lo ve “complicado hoy por hoy” en un pequeño restaurante.
“Si la teoría es que a menos horas más productividad, ¿por qué no hacemos 20 horas? Yo propondría 20 horas”, dijo Garamendi de forma jocosa, como ya hiciera anteriormente acerca de esta cuestión. “Llega un momento en que ya no sabes cómo explicarte””, se lamentó.
MEDIDAS VALIENTES
En su intervención, Garamendi miró al pasado y recordó la salida de la crisis económica de 2008, un hecho que atribuyó a las “medidas valientes” que se adoptaron entonces, como la reforma laboral de 2012 y la del sistema financiero. Aclaró en este punto que se tuvo que ayudar a las cajas de ahorro, por la “gestión de lo público”, y no a la banca privada.
Además, celebró la internacionalización de las empresas españolas y reclamó que no se ponga en el ojo del huracán a grandes compañías como las multinacionales turísticas españolas, que tienen un origen familiar.
En relación con la evolución de las últimas tres décadas de la negociación colectiva, el presidente de la CEOE pidió que no se “intervenga” en el trabajo de sindicatos y patronal y exhortó a que “nos dejen trabajar”.
De cara al futuro, imaginando como será la empresa de dentro de 30 años, Garamendi apostó por favorecer el aumento de vocaciones de empresarios. “En España tenemos grandes empresarios, empresarios de raza. Tenemos unas empresas espectaculares. Entonces, como un jardín, cuidémoslo, porque es el futuro”, apostilló.
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