MADRID, 22 (SERVIMEDIA)
Este fin de semana, que es el primero de la primavera astronómica, traerá temperaturas más frescas de lo normal en amplias zonas de España, más propias del invierno, y lluvias asociadas a la borrasca Martinho con tendencia a ir a menos.
“Durante el fin de semana van a continuar las precipitaciones. Y es que vamos a seguir bajo los efectos de la borrasca Martinho, con lluvias y chubascos repartidos por amplias zonas de nuestro país”, según Rubén del Campo, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
Del Campo precisó: “Aunque el sábado y el domingo los acumulados serán algo menores, hay que tener en cuenta que los suelos están ya muy saturados y los cauces, muy llenos, por lo que pueden continuar los problemas referidos a crecidas”, apostilló.
En cuanto a las temperaturas, tenderán a bajar, con lo que habrá heladas nocturnas en zonas del norte y el centro peninsular, y nevadas en cotas bajas.
“La semana que viene podría venir con un tiempo algo más estable, con precipitaciones sobre todo en el extremo norte de la península y algunos chubascos más dispersos en el resto del país, pero con unas temperaturas frescas para la época del año”, subrayó Del Campo.
La predicción de la Aemet, recogida por Servimedia, indica que las capitales más calurosas en la península podrían ser Alicante, Castellón de la Plana y Murcia este sábado (21), y Alicante y Sevilla el domingo (18). En Canarias, Las Palmas de Gran Canaria y Santa Cruz de Tenerife rondarán los 21 a 24 grados. Por el contrario, hará más frío ese sábado en Soria (7) y el domingo en Ávila (7).
Precisamente, el domingo será un día fresco para la época del año, con buena parte de la península entre 5 y 10 grados menos de lo habitual, mientras que las temperaturas resultarán más suaves en las provincias mediterráneas.
SÁBADO
Aunque la borrasca Martinho se irá debilitando y alejándose por el norte, este sábado continuará el tiempo inestable, con chaparrones repartidos por buena parte del territorio.
Además, podrán ser tormentosos y abundantes en el Sistema Central, Pirineos y la Cordillera Cantábrica, con una cota de nieve que se situará en torno a unos 1.100 metros en la mitad norte.
Las lluvias serán menos probables en el área mediterránea peninsular y en Baleares, mientras que en Canarias podría llover débilmente en el norte del archipiélago.
De nuevo, el viento soplará con rachas muy fuertes en zonas costeras y de montaña, y las temperaturas continuarán bajando.
DOMINGO
El domingo se espera un nuevo descenso térmico. De hecho, amanecerá con heladas en amplias zonas de la mitad norte peninsular y páramos de la zona centro.
Además, aparecerán chubascos repartidos por buena parte de la península, más intensos y persistentes en el entorno del Atlántico, montañas de Andalucía y área del Estrecho.
Las nevadas serán copiosas en las montañas y podrá nevar también en zonas de la meseta o en páramos del centro porque la cota de nieve se situará en torno a unos 800 a 1.000 metros.
Un día más, la zona con menos precipitaciones, será el extremo sureste y Baleares, mientras que en Canarias lloverá en el norte de las islas.
PRÓXIMA SEMANA
El próximo lunes aún quedarán restos de inestabilidad, pero menos acusada que en los días previos. Las lluvias más abundantes se esperan en el Cantábrico y los Pirineos, y en el resto de la península podrá haber chubascos dispersos.
La cota de nieve irá subiendo de 800 metros a primeras horas a 1.200 o 1.400 conforme avance el día. Las temperaturas ascenderán, aunque el lunes comenzará con heladas intensas en los Pirineos.
“En general, tanto el lunes como los días previos, los del fin de semana, serán jornadas frías para la época del año, especialmente los valores diurnos, que estarán entre 5 y 10 grados por debajo de la habitual para estas fechas en muchas zonas”, recalcó Del Campo.
A partir del próximo martes, la situación tenderá a ser más estable, con precipitaciones en el Cantábrico y los Pirineos. En el resto habrá posibilidad de chubascos, pero cada vez más dispersos y menos intensos. Las temperaturas tenderán a recuperarse, aunque en los primeros días de la semana próxima será algo frescos para la época del año.
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