París rechaza “categóricamente” las acusaciones de injerencia y dice que se reserva la adopción de medidas “de reciprocidad”
MADRID, 16 (EUROPA PRESS)
El Gobierno de Francia ha convocado al encargado de negocios de Venezuela en París para protestar por la decisión de Caracas de reducir el personal diplomático francés en el país sudamericano, una medida que afecta igualmente a Italia y Países Bajos, que ya protestaron durante la jornada del miércoles.
“Esta convocatoria tiene lugar tras la decisión del régimen venezolano de reducir la presencia diplomática de la Embajada de Francia en Venezuela”, ha dicho el Ministerio de Exteriores francés en un comunicado, en el que ha rechazado “categóricamente” las acusaciones de injerencia vertidas desde Caracas.
“Francia se compromete a mantener un diálogo con todas las partes para facilitar una salida pacífica a la crisis”, ha señalado, al tiempo que ha defendido el trabajo de sus diplomáticos. “Su compromiso diario en favor de una importante cooperación bilateral en los ámbitos de seguridad, cultura y actividades humanitarios es aplaudido por Francia y está plenamente en consonancia con las Convenciones de Viena sobre relaciones diplomáticas y consulares”, ha argumentado.
Por ello, ha hecho hincapié en que “Francia adoptará, a título nacional, todas las medidas de reciprocidad que considere necesarias”. “Francia mantiene una coordinación estrecha con sus socios europeos igualmente afectados por esta decisión”, ha remachado, en referencia a Italia y Países Bajos.
Durante la jornada del miércoles, Roma y Ámsterdam convocaron a los encargados de negocios venezolanos en sus respectivos países para condenar la citada orden de expulsión a varios diplomáticos decretada el martes, a raíz de las críticas a la nueva investidura de Nicolás Maduro como presidente para un nuevo mandato.
El ministro de Exteriores venezolano, Yván Gil, ordenó el martes que en las Embajadas italiana, neerlandesa y francesa en Caracas haya solo tres diplomáticos, una medida adoptada como represalia por la “conducta hostil” de estos países y su “intromisión” en los “asuntos internos”.
Además, los diplomáticos restantes “deberán contar con autorización escrita de nuestra Cancillería para desplazarse más de 40 kilómetros desde la Plaza Bolívar de Caracas, garantizando el estricto cumplimiento de sus funciones”, agregó el jefe de la diplomacia venezolana en un comunicado.
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