MADRID, 04 (SERVIMEDIA)
El Partido Popular se compromete en su programa electoral a realizar una auditoría de las cuentas públicas de la mano de la Intervención General de la Administración del Estado (IGAE), para conocer así “la situación real” de la economía española, además de “los compromisos de gasto adquiridos por el actual Gobierno y las obligaciones pendientes”.
Esta “revisión profunda” se realizará al inicio de la legislatura como ya anunció el candidato del PP a la Presidencia del Gobierno, Alberto Núñez Feijóo, hace ya un año en un foro económico, donde reconoció sus sospechas en torno al estado actual de las cuentas públicas.
“Tenemos que saber muy bien cuál es la situación económica del país porque lamentablemente tenemos experiencias de que, a veces, el gasto público y la contabilidad tienen algunos ajustes, y siempre son al alza”, declaró entonces en referencia a los traspasos de poder entre PSOE y PP. “¿Se acuerdan de que en 2011 la previsión con la que entramos al Gobierno era un déficit público del 6%? Al final sobrepasaba el 9%, sin contar los 30.000 millones de euros de deuda tarifaria que nos encontramos”, añadió.
Ahora, un año después, Feijóo traslada sus declaraciones al programa electoral del PP, en el que promete, además, que los futuros cambios de gobierno se realicen con “la mejor y más precisa información sobre el estado real de las cuentas públicas, la acción de cada área y los asuntos pendientes de la misma”.
REBAJAS FISCALES
La auditoría de las cuentas públicas se enmarca en el capítulo de ‘Controlar el déficit y la deuda y reducir la presión fiscal’. Sobre esta última cuestión, el programa recoge el compromiso que Feijóo ha reiterado una y otra vez desde que se embarcó en la política nacional: deflactar el Impuesto a la Renta de las Personas Físicas (IRPF) para corregir “una subida real de impuestos sobre la clase media”.
Asimismo, el PP se compromete a realizar una reforma “integral” que se basará en la eliminación del Impuesto Temporal de Solidaridad de las Grandes Fortunas, así como una simplificación del IRPF y el Impuesto sobre Sociedades para las pymes, “con especial atención a las empresas con pérdidas y aquellas que incrementen el promedio de su plantilla de trabajadores con contratos indefinidos”. También avanza que incluirá a la carne, el pescado y las conservas en la rebaja temporal del IVA de los productos básicos de la cesta de la compra.
En paralelo, el documento habla de mejorar el régimen fiscal para nuevos residentes con incentivos fiscales “atractivos y competitivos” a nivel global –sin detallar cuáles– con la pretensión de “promover la inversión y el desarrollo económico. También se compromete a incorporar el “derecho al error” en el ordenamiento tributario español para minimizar las consecuencias de los errores que se puedan producir en las declaraciones de contribuyentes con un registro histórico de cumplimiento.
En lo que se refiere al medio rural, el PP avanza que bonificará el Impuesto de Transmisiones y de Actos Jurídicos Documentados o el Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) por compra de una vivienda en zonas despobladas.
Por último, destaca la ausencia de referencias a los impuestos temporales a la banca y las grandes energéticas. Los populares fueron muy críticos con el diseño de ambos tributos, ya que gravaban la facturación y no los beneficios de las empresas. Sin embargo, el vicesecretario de Economía del PP, Juan Bravo, descartó hace unas semanas que su partido vaya a derogarlo. En ese sentido parece ir ahora el programa electoral.
IMPULSO A LA AIREF
En materia de control de déficit y deuda, el programa electoral del PP no aclara cómo se paliaría la merma de la recaudación que generarían estas rebajas fiscales. Ello, en una economía que cerró 2022 con un déficit del 4,8% y una deuda del 113,2% del PIB.
El programa sí promete una reforma la Ley de Institucionalización de la Evaluación de Políticas Públicas para, entre otras cosas, “fortalecer” el papel de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef) como “evaluador independiente de eficacia y eficiencia de las políticas que contribuyan a la optimización en el uso de los recursos públicos en todos los niveles de la Administración”.
A reglón seguido, concluye el capítulo de control de deuda y déficit con la promesa de intensificar el proceso de contratación centralizada para ahorrar en costes. En este sentido, si el PP llega a La Moncloa, Feijóo se compromete a analizará “a fondo las necesidades a cubrir y las respuestas que ofrece el mercado, con el objetivo de obtener una adecuada correspondencia calidad/precio”.
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