MADRID, 08 (SERVIMEDIA)
Siete de cada diez personas que cuidan a sus familiares por una enfermedad son mujeres, según el estudio ‘La situación de las mujeres con daño cerebral adquirido en España’ de la Federación Española de Daño Cerebral (Fedace), donde denuncian que “aún queda mucho por hacer para que el hombre se implique en igualdad de condiciones”.
Así lo manifestó la presidenta de Fedace, Ana Cabellos, en un encuentro informativo de la entidad en la agencia de noticias Servimedia.
Con motivo de la celebración este viernes del Día Internacional de la Mujer, Cabellos aseguró que “tradicionalmente las mujeres somos cuidadoras”. “Por desgracia estamos en un país y en una sociedad que es patriarcal. No sólo cuidamos de nuestros hijos, sino también de nuestros padres y familiares”, comentó.
Además, denunció que “si una persona tiene discapacidad o cuida de otra que la tiene, el acceso a cualquier otro recurso se ve completamente limitado. Y la vuelta al empleo es prácticamente inviable. Si este problema lo tienen las mujeres sin discapacidad esto se agrava en mujeres que sí la tienen”, destacó.
IGUALDAD DE GÉNERO
Aunque “se están dando pasos” en la igualdad de género, la presidenta de Fedace insistió en que “esto es un tema educacional”. De hecho, remarcó que “algunos hombres dicen ayudar en casa y esta creencia hay que erradicarla porque no ayudan, sino que deben ser adultos funcionales que compartan ese tipo de cuidados”.
De hecho, insistió, “el hombre debe ser parte de la solución. No es un tema de quién pone o no la lavadora, sino que hay que organizar todo el trabajo de una casa. Esto provoca una enorme carga mental en la mujer”.
“Aunque las cosas van cambiando para bien, quedan muchas por hacer. Hay una gran resistencia por parte de algunos hombres por hacerlas”, lamentó Ana Cabellos.
Una mujer que conoce bien esta situación es Loli Olivencia, familiar y cuidadora de su hermano, quien sufrió un severo traumatismo craneoencefálico a los 22 años y que la llevó a ser directora de la Asociación Vivir en Almería para ayudar a otras personas en su misma situación.
MUJER Y CUIDADORA
“Ya han pasado 26 años desde entonces y mi hermano estuvo nueve meses en coma y 14 meses hospitalizado, lo que fue un impacto para la unidad familiar”, recordó. “Cuando esto pasó todos éramos muy jóvenes. Somos cuatro hermanos y cuando más necesitaba a mi madre tuve que hacer yo ese papel con toda mi familia”.
De hecho, Olivencia aseguró que “el rol de cuidadoras” corresponde “siempre las mujeres”. Mi madre se dedicó exclusivamente a cuidar de mi hermano todo el tiempo que estuvo hospitalizado y a mí me tocó toda la carga familiar puesto que mi padre y mi otro hermano tenían que trabajar para que tuviéramos recursos económicos para salir adelante”.
Con su experiencia, insistió en que “por lo general, es la mujer la que sacrifica su entorno laboral para dedicarse a cuidar de un familiar”. “En este momento mi hermano sigue teniendo problemas con la memoria a corto plazo y es totalmente dependiente, pero ya se puede mantener una conversación con él. Al principio no nos reconocía y fue una etapa muy dura durante los dos primeros años porque tuvimos que recordarle su vida”.
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