MADRID, 29 (EUROPA PRESS)
El odontólogo del departamento de Innovación y Calidad Clínica de Sanitas Dental, Ignacio Pastor, ha apuntado que el final del verano es una época “idónea” para realizar una revisión bucodental completa y retomar la rutina “de la mejor manera posible”.
Los cambios y el descuido en los horarios, la rutina y la alimentación, característicos de las vacaciones, pueden provocar la aparición de problemas bucodentales como las caries, halitosis o enfermedades gingivales.
Según el Estudio Sanitas de Salud Bucodental 2022, 7 de cada 10 adultos españoles tienen actualmente algún problema bucodental. A este respecto, las patologías más detectadas en consulta son la sensibilidad dental, la gingivitis y el bruxismo.
“Tras unas semanas de excesos en las que es común la ingesta de alimentos azucarados y grasos y el alcohol, así como no llevar una correcta higiene bucodental y no ser tan constante como durante el resto del año, es preciso retomar la normalidad acudiendo al dentista para que valore los efectos que ha tenido el verano en nuestra salud bucodental”, explica el odontólogo del departamento de Innovación y Calidad Clínica de Sanitas Dental, Ignacio Pastor.
Ante esta situación, el experto de Sanitas Dental recomienda una serie de pautas a seguir tras las vacaciones. En primer lugar, cuidar la dieta, tratando de recuperar los hábitos alimenticios anteriores a las vacaciones. “Incrementar el consumo de alimentos ricos en vitaminas, calcio y fibra como, melón, sandía, leche, quesos blancos y verduras, entre otros, resultará muy beneficioso para la salud de los dientes y las encías”, ha comentado.
También ha instado a reducir el consumo de bebidas azucaradas y con alcohol. “Durante las vacaciones, se produce un aumento del consumo de refrescos azucarados y alcohol, y esto incrementa el riesgo de padecer problemas como las caries”, comenta. Por ello, recomienda recuperar la rutina primando la ingesta de agua y reservando las otras bebidas para momentos específicos.
También resalta la importancia de una correcta hidratación. “Beber mucha agua contribuye a mantener la cavidad oral húmeda, lo que a su vez facilita la producción de saliva limpiando la boca de bacterias. Además, el consumo de lácteos aporta calcio y ayuda a fortalecer el esmalte tras los excesos veraniegos.
Asimismo, mantener una higiene correcta es igualmente importante. “Es necesario cepillarse los dientes al menos tres veces al día, después de cada comida, y prestar especial atención al cepillado nocturno, acompañándolo del uso de seda dental y colutorio”, ha finalizado.
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