MADRID, 19 (EUROPA PRESS)
El director general de la Asociación para el Autocuidado de la Salud (anefp), Jaume Pey, ha asegurado, durante la I Green Week Selfcare, organizada por la entidad, que la sostenibilidad es el aspecto central en la estrategia de las empresas de autocuidado.
Asimismo, durante la sesión, el director general de Forética, Germán Granda, ha destacado que la agenda de sostenibilidad es “muy relevante” y debe estar en el centro de la estrategia de las empresas de autocuidado.
Para Granda, ante la situación de inestabilidad provocada tras la pandemia y la guerra de Ucrania, es importante que las empresas se anticipen y creen “agendas sostenibles resilientes”. Según ha manifestado, la sostenibilidad es cada vez más demandada por los propios directivos y por los inversores, pero también por los trabajadores y la sociedad en general. En definitiva, ha apostado por la necesidad de que las empresas contribuyan a que las personas puedan tener cada vez una mejor calidad de vida.
En esta “nueva era” surgida tras la pandemia, la salud se ha posicionado aún más en el foco y en el centro de las agendas sostenibles y empresariales, según ha señalado la responsable del Grupo de Acción de Salud y Sostenibilidad de Forética, María Ordovás.
Además, durante su intervención en la sesión inaugural de la I Green Week Selfcare, Ordovás ha apuntado que las empresas “cada vez actúan mejor y de manera más consciente”, pero todavía son necesarios mayores esfuerzos para conseguir sistemas más resilientes, “que son los que mejor han funcionado ante los retos sin precedentes de los últimos años”.
Sin embargo, un estudio realizado por Forética muestra que el 67% de las empresas españolas abordan la salud y el bienestar de sus empleados en su estrategia ESG. “Esto pone de manifiesto que aún hay margen de mejora en el mundo empresarial”, ha añadido Ordovás.
La responsable del Grupo de Acción de Salud y Sostenibilidad de Forética ha recordado que la salud es un elemento clave dentro de la estrategia de transformación que propone la Visión 2050, que tiene como objetivo que para ese año más de 9.000 millones de personas en todo el mundo (50 de ellas en España) “vivan bien y con calidad de vida”.
Además, Ordovás ha indicado que cada vez es más claro el vínculo entre el cambio climático y la salud de las personas, “lo que está llevando a gobiernos y organizaciones de todo el mundo a evaluar el impacto que tiene la actividad de las empresas sobre la salud”.
En esta línea, ha advertido que no solo es necesario poner el foco sobre el impacto que tiene la actividad que desarrollan las empresas. “Tienen que abordar la sostenibilidad también con proveedores y con su comunidad”, señala Ordovás, quien apuesta por una cadena de suministro “más ética y sostenible”.
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