MADRID, 8 (EUROPA PRESS)
Exclusión, pobreza, discriminación o desigualdad son algunas de las trabas a las que se enfrentan las mujeres y que coinciden en enumerar diferentes organizaciones y ONG este 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, una jornada que este año, desde ONU Mujeres –la organización de Naciones Unidas dedicada a promover la igualdad de género y el empoderamiento femenino– se celebra con el lema ‘Invertir en las mujeres, acelerar el progreso’.
Según el informe Evolución de la cohesión social y consecuencias de la Covid-19 en España, presentado por Cáritas en 2022, el riesgo de pobreza sigue siendo más elevado en hogares encabezados por mujeres. Durante la pandemia, el aumento de la exclusión social en familias cuya sustentadora principal es mujer creció el doble, al pasar del 18% en 2018 al 26% en 2021, mientras que en hogares encabezados por hombres aumentó del 15 al 18%, lo que lleva a Cáritas a visibilizar y denunciar las múltiples desigualdades que siguen sufriendo las mujeres que acompaña.
En el mismo sentido se manifiestan desde la Red Europea de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social en el Estado Español (EAPN-ES). A su juicio, invertir en los derechos de las mujeres es invertir en la erradicación de la pobreza y la exclusión social. Como apuntan los últimos datos en España según la tasa de AROPE, los niveles de pobreza y/o exclusión siguen siendo mayores entre las mujeres (27,5%) que entre los hombres (25,5%) por lo que un año más se perpetúa la brecha de género en detrimento de las mujeres, añade EAPN, que ve preocupante la situación de los hogares monoparentales, de los cuales más del 80% están a cargo de una mujer.
Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), en la última década las mujeres han pasado de representar el 19,7% de las personas en situación de sinhogarismo al 23,3%. Preocupa el caso de las menores de 29 años, cuyo número se ha incrementado en un 36,1% en los últimos diez años por lo que desde Futuro&Co –un proyecto de innovación social liderado por la Red FACIAM– defienden la importancia de dar una respuesta que aborde específicamente las particularidades del sinhogarismo femenino, uno de los grupos más invisibilizados en la exclusión social y cuya realidad está marcada por un peor estado de salud, sobre todo mental; una mayor exposición a la violencia y discriminación y unos bajos niveles de apoyo social.
Desde Cruz Roja Juventud y Cruz Roja Española se unen para destacar la evolución del feminismo a lo largo de la historia a través de la campaña ‘Sus huellas marcan nuestro camino. La historia cambia, la meta permanece’. Para estas organizaciones, el feminismo no es sólo una lucha constante por la igualdad de género, es un movimiento que ha transformado y ampliado sus demandas, buscando derechos fundamentales para todas las mujeres.
Por otro lado, el informe de Ipsos por el 8 de marzo revela que el 41% y el 39% de la población española percibe peor trato hacia las mujeres en el trabajo y redes sociales, respectivamente. El estudio añade que el 55% de la población española se considera feminista. En este sentido, un 61% de las mujeres españolas se declaran feministas, cifra que entre los hombres llega al 48%, aunque aumenta tres puntos respecto al año anterior. Entre los más jóvenes, un 63% de los menores de 35 años se identifican con el movimiento y existe un alto compromiso de los hombres por la igualdad de género: 7 de cada 10 están de acuerdo en que pueden ayudar con acciones individuales.
La Unión de Asociaciones Familiares (UNAF) aboga por una educación sexual integral para avanzar en igualdad y acabar con la violencia de género mientras que las organizaciones de Comercio Justo argumentan que no se puede lograr el desarrollo si no hay igualdad de género y creen que para superar la pobreza es necesario abordar de manera decidida la desigualdad entre hombres y mujeres, no solo económica sino también en otros aspectos como el sociolaboral, cultural o político.
Las mujeres gitanas centran el llamamiento de la Federación de Asociaciones de Mujeres Gitanas FAKALI que denuncia que este colectivo se topa “con muros de hormigón en vez de con techos de cristal”, ante la discriminación interseccional que sufren. “El antigitanismo de género intenta hacernos dudar de nuestra valía. Nos llaman vagas y ladronas: les mostramos nuestro título universitario. Nos llaman machistas: les enseñamos nuestras redes sororas de apoyo. Ante la evidencia sólo recibimos un simple contraargumento: sois la excepción'”, denuncian en el manifiesto de este 2024.
MUJER Y DISCAPACIDAD, DOBLE VULNERABILIDAD
El Movimiento asociativo de Mujeres con Discapacidad destaca por su parte el avance legislativo que ha supuesto la reforma del artículo 49 de la Constitución Española, el cual hace referencia a las personas con discapacidad, con la eliminación del texto de los conceptos y expresiones que suponían un prejuicio sobre ellas, así como el reconocimiento pleno de sus derechos.
No obstante, remarcan la situación de especial vulnerabilidad de las mujeres y niñas con discapacidad y desde la Confederación Estatal de Mujeres con Discapacidad (CEMUDIS) ponen el foco en este colectivo “porque de nada valdrá cambiar expresiones y conceptos si no se promueve un cambio de paradigma, incluyendo la perspectiva de género”, argumentan.
Precisamente, el empleo entre las mujeres con discapacidad creció en 2022 seis veces menos que entre los hombres, según el informe ‘Radiografía del mercado laboral de las personas con discapacidad’ realizado por la Fundación Randstad junto a Randstad Research. El análisis, elaborado a partir de los últimos datos facilitados por el IMSERSO y el INE en 2022, refleja que ese año alrededor de 21.000 personas con discapacidad lograron un empleo. Sin embargo, el aumento se dio casi exclusivamente entre los hombres, con una tasa de crecimiento del 6,6% frente al 0,7% entre las mujeres.
En términos generales, en España hay un total de 1,9 millones de personas con discapacidad en edad laboral (de 16 a 64 años), de las cuales 845.000 son mujeres (43,5%), un 1,5% más que en 2021. De ellas, 287.100 se encuentran activas para trabajar. Desde 2014, las mujeres activas han crecido un 20%, añade el estudio que precisa que el empleo entre las mujeres con discapacidad ha disminuido levemente en 2022, hasta alcanzar las 227.800 personas, por lo que la tasa de empleo del colectivo llega al 27%.
POBREZA Y EXCLUSIÓN CON ROSTRO DE MUJER
En este contexto, la Fundación Adecco, junto a más de 100 empresas comprometidas, desarrolla la Semana de la Mujer 2024 con un doble propósito: reforzar el acompañamiento a las mujeres con más dificultades de acceso al empleo y sensibilizar e implicar al tejido empresarial para generar entornos laborales más inclusivos. Así, ha lanzado la campaña de sensibilización ‘Volver a soñar’, que representa la situación de miles de mujeres en España que se han visto abocadas a diversas situaciones como renunciar a su vocación profesional, monoparentalidad, cuidados de la familia en solitario o desempleo, entre otras.
Fundación Adecco denuncia que el 27,2% de las mujeres en España (6,5 millones) se encuentra en riesgo de exclusión y/o pobreza mientras que entre los hombres, el porcentaje baja hasta el 24,8% (5,7 millones). Por ello, añade, la pobreza y la exclusión en España tiene rostro femenino pues las mujeres presentan mayores ratios de inactividad, tasas de paro superiores, protagonizan las jornadas a tiempo parcial y cuentan un menor nivel de ingresos. Además, están más expuestas al empleo en la economía irregular.
Mientras, FEDEPE, la Federación Española de Directivas, Ejecutivas, Profesionales y Empresarias, alerta sobre la necesidad de defender lo conseguido en materia de igualdad de oportunidades de género en las últimas dos décadas por lo que ve “imprescindible” blindar los derechos y avances logrados para las mujeres.
- Te recomendamos -