MADRID, 20 (EUROPA PRESS)
El Gobierno de Estados Unidos ha felicitado este lunes a la reapertura de las sedes diplomáticas de Qatar y Emiratos Árabes Unidos en sendos países, en el marco del acercamiento bilateral tras el boicot diplomático regional a Doha entre 2017 y 2021.
El portavoz del Departamento de Estado estadounidense, Matthew Miller, ha indicado en un comunicado que “se trata de otro importante paso adelante entre (sus) socios del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG)para promover la estabilidad regional y la cooperación mutua”.
Miller ha indicado que Washington está “plenamente comprometido a trabajar con el CCG y otros socios regionales para construir una región de Oriente Medio más segura, integrada, pacífica y próspera”.
Por su parte, el Ministerio de Exteriores saudí ha aplaudido “la restauración de la representación diplomática entre Qatar y EAU, en aplicación del Acuerdo de Al Ula” y ha indicado que se trata de “un paso positivo”, según un comunicado publicado en su cuenta en la red social Twitter.
Así, ha destacado que esta medida “recalca la fortaleza de las relaciones entre los países del Consejo de Cooperación de los Estados Árabes del Golfo (CCG) y contribuye a reforzar la acción conjunta en el Golfo para lograr las aspiraciones de las naciones y pueblos de la región”.
Qatar y EAU anunciaron este lunes un acuerdo para reabrir sus delegaciones diplomáticas a partir de esta misma jornada, indicando también que “ambas partes han subrayado que este paso es una representación de la voluntad de los líderes de ambos países y una consolidación del camino de acción conjunta árabe para satisfacer las aspiraciones de los dos pueblos hermanos”.
Este anuncio surge del acuerdo de Al Ula firmado en enero de 2021, que puso fin al bloqueo impuesto por Arabia Saudí, Bahréin, Egipto y EAU e implicó la reapertura de fronteras. Acercamientos como el registrado entre Doha y Abú Dabi se están acelerando tras el acuerdo en marzo entre Irán y Arabia Saudí para restaurar sus relaciones bilaterales, rotas en 2016.
Los países responsables del bloqueo a Qatar ya habían sufrido altibajos previamente en sus relaciones, especialmente en torno al apoyo de las autoridades qataríes a Hermanos Musulmanes, organización ilegalizada en la mayoría de los países del Golfo y al papel de la cadena Al Yazira en la cobertura de la conocida como ‘Primavera Árabe’.
Sin embargo, y pese a que las tensiones repuntaron en 2014 e implicaron la retirada de embajadores, en el caso de 2017 supusieron una batería de medidas mucho más duras que incluyeron la expulsión de ciudadanos del país y el cierre de las vías a medios de transporte llegados de Qatar.
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