MADRID, 19 (SERVIMEDIA)
Las poblaciones de gorrión común en España han descendido un 20% en los últimos 25 años, lo que supone la pérdida de entre seis y siete millones de ejemplares.
SEO/BirdLife aporta esos datos a través de su Atlas de Aves Reproductoras coincidiendo con el Día Mundial del Gorrión, que se celebra este jueves.
Asunción Ruiz, directora ejecutiva de SEO/BirdLife afirma: “La desaparición del gorrión no es solo una mala noticia para la biodiversidad, sino también una señal de alarma para nuestra calidad de vida”, según Asunción Ruiz, directora ejecutiva de SEO/BirdLife.
Ruiz añadió: “Necesitamos una naturaleza bien entendida en las ciudades y las aves, como los gorriones, son unos excelentes indicadores de si las ciudades cuentan con aire limpio, agua de calidad y un entorno saludable. Es el momento de recuperar espacios para la vida, asegurando que el Plan Nacional de Restauración y las políticas urbanas incluyan la biodiversidad como un pilar esencial”.
A pesar de este declive, los análisis realizados por SEO/BirdLife a través de los datos recogidos en el programa Sacre (Seguimiento de Aves Comunes Reproductoras) indican que la población de gorriones muestra una tendencia estable en la última década.
NO BAJAR LA GUARDIA
No obstante, SEO/BirdLife instó a no bajar la guardia y a seguir acometiendo medidas de conservación para garantizar la recuperación de sus poblaciones que existían en años previos al declive y garantice su supervivencia en los entornos urbanos y rurales.
El declive del gorrión común en las últimas décadas refleja una crisis ambiental en los entornos urbanos. La contaminación, la falta de espacios verdes y la transformación del paisaje urbano han convertido las ciudades en lugares cada vez más hostiles para la biodiversidad, según SEO/BirdLife.
Entre las principales amenazas que enfrentan los gorriones destacan la pérdida de lugares de nidificación, la contaminación del aire, la pérdida de zonas verdes, el cambio climático y la depredación por gatos domésticos sueltos.
PROPUESTAS
Por ello, SEO/BirdLife reclamó medidas como la restauración y la rehabilitación de edificios para garantizar la conservación de especies urbanas como el gorrión común.
Más zonas verdes y corredores ecológicos, promover infraestructuras verdes como tejados ajardinados y fachadas vegetales, diseñar edificios amigables con cajas nido y mantener huecos en rehabilitaciones, menos pesticidas en parques y jardines para proteger a los insectos de los que dependen los gorriones y fomentar la movilidad sostenible para reducir la contaminación del aire son otras medidas.
Por último, SEO/BirdLife propuso que España garantice la integración de la biodiversidad urbana en su Plan Nacional de Restauración, en cumplimiento de los compromisos internacionales adquiridos en el Marco Global de Biodiversidad de Kunming-Montreal y en el Reglamento Europeo de Restauración de la Naturaleza.
Estos acuerdos establecen que, para 2030, todas las ciudades y municipios de más de 20.000 habitantes deberán incrementar la superficie total de espacios verdes urbanos y mejorar su calidad, restaurar al menos un 10% de la superficie urbana con soluciones basadas en la naturaleza y reducir los impactos negativos de la urbanización en la biodiversidad.
- Te recomendamos -
