MADRID, 11 (SERVIMEDIA)
Las muertes en la Gaza como consecuencia de los ataques del Ejército de Israel ascienden a un promedio diario de 250, lo que “excede enormemente” el número de fallecimientos diarios de cualquier otro conflicto armado del siglo XXI.
Así lo constató este jueves Oxfam Intermón en un momento en que las hostilidades en la Franja se acercan a su día 100 tras los atentados de Hamás que acabaron con la vida de 1.200 personas el pasado 7 de octubre. Desde entonces, también han muerto 330 palestinos en Cisjordania.
La directora de Oxfam Intermón para Oriente Medio, Sally Abi Khadil, testimonió que “la escala y las atrocidades que Israel está cometiendo en Gaza son realmente impactantes” y denunció que la población gazatí “ha soportado un infierno en vida” en los últimos 100 días. “Ningún lugar en la Franja es seguro y toda la población corre riesgo de sufrir hambruna”, apostilló.
A su juicio, resulta “inimaginable que la comunidad internacional esté observando cómo se desarrolla el conflicto más mortífero del siglo XXI mientras bloquea continuamente los llamamientos a un alto el fuego”.
Oxfam Intermón reseñó que el número promedio de muertes por día en Gaza es “significativamente mayor que el de cualquier conflicto armado importante reciente”, como los habidos en Siria (96,5 muertes diarias), Sudán (51,6), Iraq (50,8), Ucrania (43,9), Afganistán (23,8) y Yemen (15,8).
La ONG explicó que la población de Gaza “se ve forzada a desplazarse a zonas cada vez más pequeñas debido a los constantes bombardeos” procedentes de lugares que “antes les habían dicho que eran seguros”.
En ese sentido, apuntó que más de un millón de personas (más de la mitad de la población) se encuentran en Rafah, en la frontera con Egipto, donde hay un “hacinamiento masivo, con muy poca comida y agua, y con medicamentos esenciales agotados”.
Oxfam Intermón añadió que la crisis se agudiza más por “las restricciones de Israel a la entrada de ayuda, el cierre de fronteras, la imposición del asedio y la negación del acceso irrestricto”, lo que provoca que únicamente llegue a Gaza el 10% de la ayuda alimentaria necesaria.
Por su parte, esta organización alertó sobre la “enorme amenaza” que representan el hambre y las enfermedades al margen de los ataques, ya que la llegada del frío y de la humedad “está haciendo que la situación sea aún más crítica, con escasez de mantas, falta de combustibles para los aparatos de calefacción y falta de agua caliente”.
Por último, respaldó “todos los esfuerzos para investigar y abordar todos los crímenes atroces masivos y violaciones de derechos humanos, independientemente de su autor”.
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