MADRID, 13 (SERVIMEDIA)
Un total de 21 menores de 14 años perdieron la vida en accidentes de tráfico hasta el pasado mes de octubre, la cifra más alta desde 2015, y que supone más del doble de los fallecimientos infantiles ocurridos en 2022, cuando fallecieron 10 chavales.
Así lo puso de manifiesto este miércoles la Alianza Española por la Seguridad Vial (Aesvi) en un comunicado en el que recogió datos provisionales de la Dirección General de Tráfico (DGT), en lo que se pone de manifiesto que de los 21 menores fallecidos en accidentes de tráfico, 17 eran ocupantes de vehículos de turismo.
Ante esta situación, el vicepresidente de Aesvi e investigador y profesor de la Universidad de Zaragoza, Juan José Alba, arguyó que “son ya demasiados años resignándonos a no dar pasos valientes”. A su juicio, “no hace falta realizar un profundo análisis para darnos cuenta de que el aumento de la dureza de las sanciones por no utilizar los sistemas de retención infantil o utilizarlo de manera incorrecta no es la solución a la siniestralidad vial infantil”.
Por ello, conminó a las autoridades a “realizar una reflexión profunda y aceptar que sus estrategias de seguridad vial infantil no son adecuadas”.
Aesvi puso de manifiesto que los menores de edad representan “uno de los colectivos más vulnerables que transitan las vías de circulación”, por lo que “requieren especial atención y protección por parte de los adultos”.
En ese sentido, apuntó que “un niño desprovisto de su sistema de retención infantil es el ocupante sometido a mayor riesgo de fallecimiento o lesiones graves en caso de accidente”. Por esa razón, consideró que “ese mismo niño haciendo uso de un sistema de retención infantil adecuado será el ocupante mejor protegido”.
Ante esta situación, reclamó la puesta en marcha de “políticas rigurosas y coherentes en las que no quepan tan incomprensibles excepciones a la seguridad infantil como las que se hacen en los taxis que circulan por zonas urbanas o en los autobuses escolares”.
Aesvi reseñó que la situación en torno a los menores en cuestiones de tráficos es de “emergencia” y sugirió que la investigación técnica de los accidentes sirva como “base de nuevos modelos de prevención que trasciendan las sanciones y que estén integrados por medidas valientes, innovadoras, efectivas y eficaces que trabajen directamente en la detección de las causas” de los siniestros y “permitan ejecutar la mejor solución para que no vuelvan a suceder”.
También solicitó que “formación técnica específica impartida por expertos en la materia capaces de transmitir su conocimiento de manera clara”, ya que “cuando los padres conozcan la evidencia de que el uso correcto de los sistemas de retención infantil es esencial para proteger la vida de sus hijos cuando viajan en coche no será necesario apelar a las sanciones económicas”.
- Te recomendamos -