MADRID, 08 (SERVIMEDIA)
La ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz, proclamó este lunes que “Alemania está copiando a España” con el Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI), una sobrecotización de empresas y trabajadores con la que se está contribuyendo a dotar de nuevos recursos al fondo de reserva de las pensiones.
“Un país como Alemania tiene que copiar, o está copiando a España, con lo cual, entendemos que es una buena práctica exportable a países y a fortalezas económicas en el seno de la Unión Europea”, declaró Saiz en su comparecencia en la Comisión del Pacto de Toledo del Congreso de los Diputados, que se desarrolló con discrepancias entre Gobierno y oposición pero con un buen clima de diálogo, lo que pusieron de relieve todos los grupos y la propia ministra.
La ministra también valoró que el gasto en pensiones “continúa en niveles razonables” y agregó que “las medidas están teniendo buenos resultados”. Y todo, mientras destacó que mantiene la meta de que en esta legislatura la Seguridad Social alcance el equilibrio presupuestario.
En el turno de preguntas de los partidos, el diputado del PP Miguel Ángel Paniagua tendió la mano al Gobierno para seguir llegando a acuerdos en materia de Seguridad Social y pensiones y celebró que, en su opinión, Saiz haya “reconocido” que en los últimos años se ha hecho una “mala gestión” de esta institución.
Además, subrayó que Fedea ha indicado que los últimos cambios son “un paso atrás” en materia de sostenibilidad de pensiones y dudó del compromiso de la ministra de que este organismo alcance el equilibrio presupuestario en esta legislatura. También avisó de que la Seguridad Social es el único nivel de la Administración que incrementó su déficit en 2023.
“Necesitaría que me lo confirmara”, lanzó el diputado ‘popular’’, quien auguró que 2025 será un año relevante para evaluar la marcha del sistema tras la última reforma.
Asimismo, reclamó a la ministra “un poco más de transparencia” con el Congreso de los Diputados. “Nos parece muy bien que el diálogo social avance en negociaciones, se estudie con ellos, se tramite con ellos, pero yo creo que nosotros, el Congreso de los Diputados y esta Comisión, se merece, al menos, tener la misma información”, defendió Paniagua, aludiendo a las mesas de negociación con sindicatos y patronal.
Al respecto, la ministra censuró que el PP no haya hecho alusión a que hace pocos días se alcanzaran los 21 millones de afiliados a la Seguridad Social en términos desestacionalizados.
DEUDA
Por su parte, el diputado de Vox Pablo Sáez centró su intervención en alertar del alto nivel de deuda de las administraciones y sostuvo que “una persona sensata debería estar preocupada” por esta situación, ya que España es uno de los seis países europeos que tiene una deuda superior a su producto interior bruto (PIB).
Igualmente, denunció que es “una irresponsabilidad seguir elevando el coste al trabajo en el país con mayor tasa de paro de la UE” pese al problema de baja productividad. “Es triste pero cierto: ustedes legislan contra el trabajo”, reprobó Sáez, quien afeó también que España esté “a la cola” en ayudas a las familias e impulso de la natalidad.
En esta línea, la ministra replicó a Saiz que “una persona sensata” lo que hace es “poner en valor los datos económicos que se están teniendo”, que son “absolutamente objetivos”.
HACIA DÓNDE VAMOS
Por otro lado, la diputada del PNV Idoia Sagastizabal reconoció avances positivos en materia legislativa de pensiones, pero aclaró que eso no “impide que seamos críticos” para “saber y conocer hacia dónde vamos, porque yo personalmente a veces lo desconozco”.
“No sé si con el sistema de pensiones estamos empezando a solapar y a encubrir lo que tiene que ser gasto social, que debería ser sufragado de otra manera. Y el sistema de pensiones, desde luego, tiene que atender a la garantía de una pensión de quienes son personas trabajadoras”, cuestionó la diputada nacionalista.
En paralelo, el parlamentario de Bildu Iñaki Ruiz de Pinedo puso el foco en que las pensiones no solo son un gasto, sino un “dinamizador” de la economía por el peso que tiene en las rentas de millones de españoles y, por tanto, en el consumo. Asimismo, mostró su preocupación por que en la mesa de diálogo social de negociación de pensiones se “excluya” a la mayoría sindical del País Vasco, aludiendo a que solo tienen presencia CCOO y UGT.
Se mostró crítico con que se quiera dar mayor peso en el tratamiento de las mutuas en la recuperación de los trabajadores con patologías traumatológicas y defendió que “no se van a solucionar los déficits” del sistema público de salud. “Nos preocupa mucho esta situación”, remarcó Ruiz de Pinedo.
También dudó de los efectos que tendrá la reforma de los coeficientes para la reducción de la edad legal de jubilación en actividades penosas y peligrosas, lo que se haría teniendo en cuenta aspectos como las bajas médicas. En opinión del diputado de Bildu, son precisamente algunos de estos empleos los que menos bajas médicas registran por la mayor precariedad.
Desde Junts, Josep Maria Cervera pidió mas competencias para Cataluña y defendió que, pese al “triunfalismo” del Gobierno, hay dudas sobre la sostenibilidad de las pensiones. “Si queremos pensiones dignas a medio y largo plazo, necesitamos una economía productiva que genere valor añadido, con trabajadores cualificados y salarios de calidad”, agregó.
Mientras, el parlamentario de Esquerra Republicana Jordi Salvador explicó que si se devolviera a la Seguridad Social todo lo que en el pasado sirvió para pagar otras políticas “se acabaría el déficit” del sistema. “Si este dinero hubiera ido donde debía ir y hubiera una restitución, se podría mejorar mucho más el sistema de pensiones”, abundó Salvador, quien criticó que se intenten promover fondos de pensiones “bonificados” por el Estado. “¡Tiene narices!”, exclamó.
Finalmente, las fuerzas del Gobierno de coalición (PSOE y Sumar) apoyaron las medidas que se están adoptando y las contrapusieron con las políticas que llevó a cabo el PP, al tiempo que rechazaron las “manipulaciones” que se hacen desde algunos ámbitos para poner en cuestión el futuro del sistema público de pensiones.
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