MADRID, 17 (EUROPA PRESS)
El Parlamento de Líbano ha aprobado una ley que establece un sistema integral de pensiones para los trabajadores del sector privado y reforma fundamentalmente la gobernanza del Fondo Nacional de Seguridad Social (NSSF) en uno de los avances más ambiciosos de las últimas décadas; uno que ocurre en un momento de crisis económica y política extremadamente delicadas para el país.
Hasta la resolución adoptada el viernes por el Parlamento, Líbano era uno de los dos únicos países de la región árabe sin un plan de protección de los trabajadores asegurados con prestaciones periódicas a largo plazo por jubilación, muerte e invalidez, recuerda la agencia oficial de noticias libanesa NNA.
Los pensionistas libaneses se han visto afectados por la serie de crisis sin precedentes que han afectado al país desde 2019, desde el colapso de la economía hasta la pandemia de COVID-19 y la explosión del puerto de Beirut en agosto de 2020.
Las crecientes tasas de pobreza y desempleo en todo el país, sumadas a un sistema de protección social inadecuado, han hecho que sea cada vez más difícil para todas las personas satisfacer sus necesidades básicas y, en particular, han afectado negativamente el bienestar social y físico de las personas mayores.
En un comunicado, la directoro regional para los Estados Árabes de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), Ruba Yaradat, ha manifestado que “en un momento de crisis sociales y económicas sin precedentes, hace falta más que nunca un sólido mecanismo público de protección social para garantizar el avance necesario de la justicia social y la recuperación económica”.
Mohamed Karaki, director general del NSSF, ha elogiado el programa como “una de las reformas socioeconómicas más importantes que el Líbano ha logrado en los últimos 30 años”, recoge NNA.
Según la OIT, “los nuevos beneficios de pensión se calcularán teniendo en cuenta dos montos mínimos garantizados: el primero consiste en el 80 por ciento del salario mínimo después de 30 años de cotización, y el segundo es el 1,33 por ciento por cada año del promedio revalorizado del salario del asegurado”.
Asimismo, “las prestaciones se pagarán en caso de invalidez y se transferirán a los sobrevivientes en caso de fallecimiento del asegurado o del pensionado. Los valores de las pensiones también se indexarán a la inflación mediante un proceso de ajuste anual”.
En una intervención posterior, el líder sindical y presidente de la Confederación General de Trabajadores de Líbano (CGTL), Bchara el Asmar, ha aplaudido la ley “un punto de inflexión fundamental en el interés de los asegurados, al servir como garantía para la continuidad del salario después de la jubilación”.
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