MADRID, 16 (EUROPA PRESS)
La incursión militar lanzada por las fuerzas ucranianas en la región rusa sobre Kursk pilló a Rusia por sorpresa y “no estaba preparada” para hacerle frente, según un informe de los servicios de Inteligencia de Reino Unido, que han confirmado una reconfiguración de la logística en la zona.
La incursión comenzó el 6 de agosto y se extiende a lo largo de 40 kilómetros. Las tropas ucranianas han penetrado entre 10 y 25 kilómetros en función de las zonas, reza el informe divulgado este viernes por el Ministerio de Defensa británico.
Pese a que las Fuerzas Armadas rusas habían establecido líneas de defensa en la zona, “no estaban preparadas para una fuerza de asalto con múltiples batallones”, han concluido los expertos británicos.
Al “desorden y desorganización iniciales” le ha seguido una movilización adicional de tropas por parte de Rusia, “probablemente” a costa de trasladarlas desde otros frentes de combate. Además, “han comenzado a construir posiciones defensivas adicionales con vistas a prevenir avances ucranianos”.
El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, aseguró el jueves que las fuerzas leales a Kiev se han hecho ya con el control de 82 localidades en la región rusa de Kursk. El Ejército ucraniano también ha intensificado sus ataques contra otras zonas fronterizas de Rusia como Bélgorod.
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