MADRID, 14 (SERVIMEDIA)
El presidente del Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (Cermi), Luis Cayo Pérez Bueno, alabó este viernes la reciente creación del Centro Europeo de Accesibilidad. “Es un buen prolegómeno”, resaltó, pero reconoció que en el colectivo de personas con discapacidad “queríamos más”.
Así se manifestó en una entrevista con Servimedia a propósito de la recién estrenada Presidencia de España del Consejo de la Unión Europea, en la que precisó que “nunca tendremos un nivel de satisfacción aceptable” porque “hay un gran trabajo pendiente por hacer” e “inmediatamente que se consigue un logro nos activamos para conseguir otro”. Nunca podemos conformarnos porque nuestra situación de partida en menesterosa”.
Sin embargo, sí que destacó que el Centro Europeo de Accesibilidad es un logro importante porque “es la primera vez que la UE tiene algo operativo, ejecutivo en el ámbito de la accesibilidad y no meramente declarativo, como estábamos acostumbrados”.
La pena es, precisó el presidente del Cermi, que el centro no se haya ubicado en España. “Eso no ha podido ser, pero no renunciamos a conseguirlo más adelante”. Así mismo, destacó el papel que ha jugado en todo el proceso “el Grupo Social ONCE y su Fundación. Es una muestra de confianza por parte de la UE hacia quien más sabe y quien más hace por la accesibilidad”.
Por el contrario, Pérez Bueno lamentó que la tarjeta europea de la discapacidad no podrá ser una realidad este año, pese a que la considera “un hito, uno de los hechos más importantes de los últimos 20 años”. “Creo que no será posible por temas puramente de procedimiento”, ya que habrá que definir si será un reglamento o una directiva, que es rango menor. “Esperamos y confiamos en que sea un reglamento porque tiene más fuerza en el ordenamiento jurídico de la UE y eso lleva unos trámites. Pero creo que en la Presidencia europea se puede dejar todo preparado para que se apruebe la tarjeta el año que viene. Serán unos meses más pero se puede decir con cierto orgullo nacional que el gran trabajo se ha hecho durante la Presidencia española”, señaló.
“Aunque lo social en Europa es de segunda división, colateral, accesorio, siempre está ahí, sin el glamour de lo novedoso, pero está presente por la pasión que pone el movimiento social de la discapacidad para dar visibilidad”, concluyó el presidente del Cermi.
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