MADRID, 02 (SERVIMEDIA)
El Gobierno atribuyó este martes la ralentización en la creación de empleo a la estacionalidad del sector educativo, cuyos contratos terminan al final del curso, a la incertidumbre por la guerra en Ucrania, y al repunte de la inflación.
El secretario de Estado de Empleo y Economía Social, Joaquín Pérez Rey, y el secretario de Estado de la Seguridad Social y Pensiones, Borja Suarez, analizaron en una rueda de prensa los datos publicados este martes por el Ministerio de Trabajo y Economía Social y el Ministerio de Inclusión Seguridad Social y Migraciones sobre el paro registrado y la filiación a la Seguridad Social del mes de julio.
Pérez Rey remarcó los datos “espectaculares desde la reforma laboral”, de la que dijo que “carece de precedentes en cuanto a su eficacia” y “nos aleja de los patrones en los que estábamos anclados”.
Afirmó que los datos se deben en una parte a la incertidumbre económica mundial, a la inflación y al conflicto bélico en Ucrania que “tiene un contagio limitado en el mercado laboral”.
Sobre el comportamiento en la educación, explicó que es “uno de los sectores donde aún no ha alcanzado con plena intensidad la reforma laboral” al haberse iniciado el curso en septiembre antes de la aprobación de la reforma laboral.
Pérez Rey defendió que este “ligerísimo repunte” del paro en julio respecto al mes anterior “muestra una nueva configuración de nuestro mercado de trabajo mucho más resiliente. Antes, ante los cambios de ciclo económico el mercado de trabajo reaccionaba con bastante virulencia y seguramente a partir de la reforma laboral tenemos un mercado de trabajo más robusto que tiene capacidad de resistencia a través de mecanismos distintos que la contratación temporal o los despidos”.
El secretario de Estado de Empleo sostuvo que los datos indican que julio está cambiando su fisionomía, ya que se han anticipado las contrataciones de verano y en julio “no ha habido tantas contrataciones como en años anteriores, algo que pasó también en 2019”.
No obstante, se mostró cauto afirmando que los datos son un “toque de atención aunque sea un mercado laboral que está más preparado que nunca para hacer frente a las crisis”.
En cambio, el secretario de Estado de la Seguridad Social y Pensiones afirmó que los datos de afiliación son “extraordinarios por la consolidación de un nivel de afiliación” y “ofrece una fotografía de una tendencia positiva”. Lo defendió comparando los datos de los siete primeros meses del año 2019, anterior a la crisis de la covid-19, con los del 2021, cuando el ritmo de crecimiento es mayor y los resultados son “muy positivos”.
Suárez remarcó que los contratos indefinidos superan “muy ampliamente la situación previa” a la pandemia.
De cara a los próximos meses, Pérez Rey señaló que si “atendemos al comportamiento habitual del mercado de trabajo a partir del mes de agosto no sería sorprendente que el paro entre en un ciclo de estacionalidad negativa” que no se asociaría a un desequilibrio económico sino a “la marcha habitual”. “Es difícil hacer una conjetura de cómo va a ser la evolución fuera de estos parámetros de estacionalidad”, finalizó.
- Te recomendamos -
