MADRID, 28 (SERVIMEDIA)
El Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) registró en 2022 su primer beneficio, de 2.217 millones de euros, derivado principalmente de la positiva evolución de la cotización de CaixaBank, entidad en la que el FROB posee un 17,3% a través de BFA.
Según informó el FROB este miércoles, esa mejora de la cotización ha ocasionado un ingreso contable por la reversión del deterioro de la participación de FROB en BFA de 1.851 millones de euros en 2022. Este ingreso contable, al igual que las pérdidas por deterioros en ejercicios anteriores, “carece de impacto en el déficit o la deuda pública”, resaltó el organismo.
La acción de CaixaBank acumula una revalorización de un 142,8%, desde el anuncio de la operación de fusión con Bankia hasta el cierre del ejercicio 2022.
El FROB registró en 2021 unas pérdidas de 1.352 millones, que entonces fueron un 63% inferiores a las de 2020.
Por otra parte, el balance del FROB a cierre de 2022 asciende a 7.052 millones, con un patrimonio neto positivo de 5.065 millones.
Como ya se hizo en el ejercicio 2021, el FROB ha estimado el valor contable de su participación en BFA, entidad que posee al 100% y a través de la que participa en CaixaBank, tomando como referencia el patrimonio neto individual de BFA, reflejado en las cuentas anuales a 31 de diciembre de 2022, ajustado con las plusvalías tácitas existentes en la fecha de valoración.
Ese patrimonio neto de BFA ascendió a 4.958 millones en 2022, por encima de los 4.491 millones del año anterior. El importe de las plusvalías fue de 1.384 millones, derivado de la revalorización de los títulos de CaixaBank. En consecuencia, el valor neto contable de la participación del FROB en BFA suma 6.343 millones, lo que ha resultado en revertir deterioro por un importe de 1.851 millones.
En cuanto a Sareb, el FROB ya había registrado en 2019 el saneamiento total de su participación y el año pasado, cuando se culminó el proceso de toma de control público, la participación en Sareb continúa íntegramente deteriorada, sin efectos en las cuentas de 2022.
Al beneficio también contribuyó que el año pasado venció el aval o EPA de Banco de Valencia y el pago para la liquidación definitiva, que se producirá en los próximos meses, asciende a 65,8 millones, con un impacto positivo para el FROB por la liberación de provisiones de 77,6 millones.
También se ha registrado un impacto neto positivo de 253 millones por la liberación de una provisión tras una resolución judicial favorable al FROB.
Sin tener en cuenta el efecto positivo de la valoración de BFA, el resultado financiero fue negativo por un importe de 18,8 millones, derivado principalmente del gasto financiero del pasivo del FROB (préstamo del Tesoro para canalizar los fondos derivados del préstamo del MEDE). A 31 de diciembre de 2022, este préstamo tenía un saldo de 1.865 millones de euros.
Como ingresos extraordinarios, anotó 30,5 millones el año pasado como consecuencia de acciones judiciales en procedimientos en curso.
Por su parte, el Fondo de Resolución Nacional (FRN) registró un resultado positivo de 2.895 millones, procedente de la recaudación de las contribuciones al FRN realizadas por las entidades sujetas.
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