MADRID, 7 (EUROPA PRESS)
Después de mostrarse prometedor en las primeras investigaciones de laboratorio, el fenofibrato, un fármaco para reducir el colesterol, no tuvo un efecto significativo en los resultados de la Covid-19 en un ensayo clínico aleatorio internacional multicéntrico dirigido por científicos de Penn Medicine en Filadelfia (EEUU).
“A pesar de los efectos prometedores del fenofibrato sobre el SARS-CoV2, el virus que causa la COVID-19, nuestros hallazgos demostraron de manera convincente que no es una estrategia útil para disminuir la gravedad de la enfermedad o prevenir malos resultados en pacientes con COVID-19”, ha señalado el primer autor e investigador principal del ensayo, Julio Chirinos, profesor de Medicina Cardiovascular y codirector de investigación clínica del Programa de Capacitación T32 en Biología y Medicina Cardiovascular de la Facultad de Medicina Perelman de la Universidad de Pensilvania.
“A pesar del tiempo, la complejidad y el costo asociados con la ejecución de ensayos clínicos rigurosos, son esenciales para evaluar la eficacia de los medicamentos en pacientes con COVID-19, ya que la efectividad de un medicamento puede ser sustancialmente diferente de lo que pueden sugerir los estudios ‘in vitro’. Los ensayos clínicos son necesarios antes de la implementación clínica de las terapias farmacológicas, incluso en el caso de medicamentos que ya están ampliamente disponibles para otras indicaciones”, ha añadido.
El fenofibrato es un medicamento genérico de bajo costo y ampliamente disponible, previamente aprobado por la Administración de Drogas y Alimentos de los Estados Unidos y muchas otras agencias reguladoras para reducir la cantidad de sustancias grasas, como el colesterol y los triglicéridos, en la sangre, al mismo tiempo que aumenta el colesterol “bueno”.
El fármaco se destinó inicialmente a la investigación de la COVID-19 como parte de un esfuerzo por probar fármacos más antiguos aprobados previamente para obtener un beneficio potencial contra el virus. En estudios de laboratorio, se encontró que la producción excesiva de ciertas moléculas de grasa por parte de las células está involucrada en el daño celular causado por el SARS-CoV2.
El fenofibrato afectó la forma en que las células manejan la grasa de una manera que redujo la replicación viral. En estudios de laboratorio adicionales, el fenofibrato también afectó al receptor celular del virus, reduciendo la replicación viral.
Para probar la eficacia del fármaco en las personas, el equipo del estudio inscribió a 701 participantes, y cada participante experimentó por primera vez los síntomas de Covid-19 en las últimas dos semanas. El equipo de estudio aleatorizó a 351 pacientes para que fueran tratados con 145 miligramos de fenofibrato (o preparaciones equivalentes en otros países) y 350 con un placebo.
Luego, los pacientes se clasificaron en función de un novedoso sistema de puntaje de gravedad que midió la gravedad de la enfermedad junto con factores que incluyen la muerte, el uso de ventiladores invasivos y no invasivos, la duración de la estadía en el hospital, así como el tiempo hasta la hospitalización y la gravedad de los síntomas entre los pacientes ambulatorios.
En comparación con el placebo, el fenofibrato no tuvo un efecto significativo ni en las puntuaciones de gravedad ni en la muerte por cualquier causa, entre otras métricas. De manera similar, no hubo diferencias en los resultados hasta 30 días después de la aleatorización inicial. Es importante destacar que los hallazgos fueron consistentes en todos los países y no se vieron afectados por el sexo, la edad, la raza, el índice de masa corporal, el estado de la diabetes o el momento en que los pacientes iniciaron el tratamiento.
Los autores señalaron que podría haber una serie de posibles explicaciones para el fracaso del fármaco en lograr los mismos resultados en humanos que en células de laboratorio. “El Covid-19 es complejo e implica no solo su efecto tóxico en las células, sino también en un conjunto complejo de respuestas sistémicas del huésped”, ha señalado la coautora Jordana B. Cohen, MD, MSCE , profesora asistente de Renal-Electrolyte and Hypertension en Pensilvania.
Por lo tanto, concluye, “los efectos celulares de los medicamentos observados en un sistema de placa de Petri pueden no traducirse en efectos beneficiosos en personas con COVID-19 como resultado de una amplia gama de fenómenos potenciales en organismos completos. Nuestro ensayo refuerza la importancia de no equiparar la eficacia de laboratorio con la eficacia clínica en el contexto de COVID-19”.
El equipo del estudio, que ha sido publicado en la revista ‘Nature Metabolism’, ha solicitado más estudios para evaluar si otras intervenciones diseñadas para afectar las vías metabólicas celulares pueden afectar los resultados en personas con COVID-19.
- Te recomendamos -