MADRID, 13 (EUROPA PRESS)
El Ejército de Sudán ha asegurado haber repelido una nueva ofensiva de las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF) contra la ciudad de El Fasher, capital del estado de Darfur Norte, y ha afirmado que el grupo ha sufrido “grandes pérdidas” en los combates, en el marco de al guerra civil desatada en abril de 2023 en el país africano.
El portavoz de las Fuerzas Armadas, Ahmed Husein Mustafá ha indicado que las RSF han lanzado un ataque “a gran escala contra la ciudad” y ha hablado de “un nuevo capítulo épico” por las “graves pérdidas” sufridas por los paramilitares en los enfrentamientos, con unos 80 muertos entre las filas del grupo encabezado por Mohamed Hamdan Dagalo, alias ‘Hemedti’.
Las RSF no se han pronunciado sobre los enfrentamientos, si bien cuentas en redes sociales vinculadas con los paramilitares han publicado mensajes apuntando a la muerte de varios de sus altos cargos, entre ellos el comandante Abdelrahman Qarn Shata, según ha informado el portal sudanés de noticias Sudan Tribune.
Los enfrentamientos en El Fasher, sometido desde hace meses a un asedio por parte de los paramilitares para intentar hacerse con el control de la ciudad, han provocado un éxodo masivo de población. Más de un millón y medio de personas se estaban refugiando de los combates en la localidad y los campos de desplazados de alrededor hasta que las RSF comenzaron su ofensiva de noviembre.
Sudán se encuentra sumido en una guerra civil a raíz de las hostilidades que estallaron en abril de 2023 en el marco de un aumento de las tensiones en torno a la integración de las RSF en el seno de las Fuerzas Armadas, parte clave de un acuerdo firmado en diciembre para formar un nuevo gobierno civil y reactivar la transición abierta tras el derrocamiento en 2019 de Omar Hasán al Bashir, dañada por el golpe de Estado de octubre de 2021, en el que fue derrocado el primer ministro de unidad, Abdalá Hamdok.
En este contexto, un grupo de expertos de Naciones Unidas reclamó la semana pasada el despliegue de “una fuerza independiente e imparcial” para proteger a la población de Sudán ante las “horrorosas violaciones” de los Derechos Humanos en el marco del conflicto, algunas de las cuales podrían equivaler a crímenes de guerra y contra la humanidad.
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