MADRID, 17 (SERVIMEDIA)
El Consejo General de Enfermería (CGE) anunció este viernes que ha repartido 50 deshumidificadores entre las personas afectadas por la dana que afectó a parte de la provincia de Valencia en octubre, que se suman a los 300 dispositivos que entregó en la última semana del año.
Lo hizo en un comunicado en el que explicó que ha recibido a través de su ONG Solidaridad Enfermera más de 300.000 ayudas y materiales para los afectados por la dana. De manera específica, se han entregado deshumidificadores, “dispositivos muy necesarios” en este tipo de catástrofes.
En ese sentido, repartió 50 deshumidificadores, que se suman a los 300 dispositivos que se entregaron durante la última semana del año.
El CGE apuntó que desde una nave cedida por Mapfre ha distribuido toda clase de materiales que se consideran “esenciales para poder mejorar la calidad de vida de los miles de damnificados por esta tragedia climática”, habiéndose entregado más de 50.000 donaciones efectuadas por la población española.
El presidente del Consejo General de Enfermería atestiguó que el colectivo se mantiene “al pie del cañón prestando sostén y cuidados a los ciudadanos que vieron su vida trastocada por el paso de la dana” y explicó que Solidaridad Enfermera sigue coordinando junto con el Colegio de Enfermería de Valencia y el Consejo de la Comunidad Valenciana (Cecova) “el reparto certero de materiales y ayudas para que éstas lleguen donde más se necesitan”.
El CGE expuso que tras un desastre natural como una inundación el regreso a una casa afectada puede presentar riesgos para la salud debido a la posible contaminación por moho, hongos y bacterias, por lo que el uso de deshumidificadores “disminuye la cantidad de biocontaminantes en el aire”.
Al margen de estos dispositivos, la donación de material por parte de esta entidad se ha centrado en materiales sanitarios e higiene y productos para bebés, como empapadores, pañales, esponjas jabonosas, tensiómetros, termómetros, mantas, pulsioxímetros y andadores.
Por último, las organizaciones implicadas en el reparto inciden en la necesidad de que “la ayuda se planifique a medio y largo plazo”, ya que “la recuperación de las zonas no es inmediata y necesita ese apoyo prolongado”.
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