MADRID, 11 (EUROPA PRESS)
El Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI) junto con la Fundación Derecho y Discapacidad han elaborado un informe en el que se describe el impacto en los derechos de las personas con discapacidad del nuevo Reglamento de la Unión Europea sobre Inteligencia Artificial y, entre los aspectos negativos, critican su enfoque “proteccionista”.
El informe, elaborado por el profesor, investigador y divulgador científico de la Universidad Carlos III de Madrid con especialidad en Derechos Humanos, Discapacidad y Tecnología, Francisco Bariffi, señala que “el reglamento tiende a ver a las personas con discapacidad principalmente como sujetos de protección, en lugar de considerarlas agentes activos en el desarrollo y evaluación de los sistemas de IA”.
“Esto limita su participación en la creación de tecnologías que afectarán directamente sus derechos, y no se establecen mecanismos claros para garantizar su implicación en las decisiones que les afectan”, subraya.
Además, critican que el Reglamento presenta una notable “asimetría normativa” entre las disposiciones de la exposición de motivos y las vinculantes, lo que reduce su efectividad; una falta de “medidas específicas” y un enfoque integral, ya que “aunque se reconoce a las personas con discapacidad como un grupo vulnerable, el reglamento carece de disposiciones específicas que aborden de manera integral los desafíos que plantea el uso de IA para este colectivo en áreas clave como la educación, el empleo y los servicios esenciales”.
Asimismo, añaden que el reglamento “se centra en prohibiciones y regulaciones de alto riesgo, pero no profundiza en cómo la IA podría beneficiar activamente la vida de las personas con discapacidad ni en cómo puede promoverse su inclusión y empoderamiento”.
También precisan que, para los sistemas que no se consideran de alto riesgo, el reglamento se apoya en códigos de conducta voluntarios para garantizar la accesibilidad y advierten de que “esta dependencia de la voluntariedad puede resultar insuficiente, ya que no asegura que todos los sistemas de IA tengan en cuenta las necesidades específicas de las personas con discapacidad”.
Mientras, entre las fortalezas del Reglamento, se menciona el reconocimiento explícito de las personas con discapacidad como un grupo vulnerable que requiere protección especial y la prohibición de prácticas abusivas que exploten sus vulnerabilidades.
Finalmente, el informe sugiere varias mejoras para que el Reglamento sea más inclusivo, entre ellas, fortalecer las disposiciones vinculantes, la participación de las personas con discapacidad, medidas proactivas para la inclusión y mecanismos de seguimiento continuo para monitorizar el impacto de la IA en este colectivo.
- Te recomendamos -
