MADRID, 11 (SERVIMEDIA)
El 69% de los profesionales de los sectores sanitarios y sociosanitarios con covid persistente no tiene reconocidas las secuelas en su baja médica, según recoge un estudio de CCOO Sanidad Madrid en colaboración con el Colectivo Covid Persistente de Madrid.
El estudio pretendía conocer la incidencia de los problemas de salud que afectan a las personas trabajadoras de los sectores sanitarios y sociosanitarios y su enorme impacto, ya que a fecha de hoy continúan presentando síntomas tras haber padecido covid-19. También buscaba obtener una aproximación de la percepción subjetiva del estado de salud de los participantes y qué tipo de problemas físicos, psicosociales y mentales quedan como secuela a medio y largo plazo.
Los resultados indicaron que el 93% de los encuestados había padecido covid-19. De ellos, el 13% precisó ingreso hospitalario y el 3% en UCI. El 90% cursó baja laboral por incapacidad temporal (IT). De las IT, en el 37% de los casos fueron de menos de un mes; en el 31%, de uno a seis meses; en el 9%, de seis a 12 meses; y en un 24%, de más de 12 meses.
Además, una de cada tres personas necesitó posteriormente un nuevo periodo de baja por IT. De estos casos, el 31% se consideró recaída y un 69% requirió una nueva incapacidad temporal que fue considerada como una nueva IT, a pesar de tener la misma etiología.
Los principales síntomas son un 74% por fatiga; un 62% dolor articular; un 61% niebla mental ; un 58% problemas de memoria ; y un 38% dificultad para respirar.
A su vez, el 58% percibe limitaciones o secuelas como incapacidad para realizar sus labores habituales dificultades respiratorias; graves dificultades de concentración; alteraciones en la deambulación; pérdida del olfato; ausencia de gusto para saborear comidas; imposibilidad de realizar ejercicio físico; insomnio o alteraciones visuales.
Según CCOO, cada vez hay evidencias más sólidas de que la pandemia tiene un efecto negativo sobre la salud psicosocial de la población en general y que ha tenido importantes repercusiones en la salud de los trabajadores de estos sectores en particular.
Por ello, el sindicato instó a las Administraciones públicas a ofrecer respuestas adecuadas y específicas para estos colectivos de profesionales, y propuso, entre otras medidas, unidades de tratamiento específico en la sanidad pública y, por supuesto, el reconocimiento de las bajas e incapacidades laborales.
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