MADRID, 25 (SERVIMEDIA)
El gasto de la Seguridad Social en incapacidades permanentes ha experimentado un fuerte incremento en los últimos años y se encuentra en niveles máximos, una realidad que tiene múltiples causas.
Así lo explican desde CCOO, CEOE y fuentes del Ministerio de Seguridad Social, que, eso sí, coinciden en señalar el aumento de los tiempos de espera que se ha producido en los últimos años para ser atendido en el sistema sanitario como uno de los factores desencadenantes.
El récord que se está experimentando en gasto por bajas médicas fue puesto también de relieve recientemente por el Banco de España en una conferencia. En concreto, hasta noviembre de este año, las obligaciones reconocidas para la incapacidad temporal (IT) en el conjunto del sistema de la Seguridad Social, ascendían a 12.717,13 millones de euros, de un presupuesto para el conjunto del año de 13.709.
En los años anteriores, de los que sí existe información del conjunto del ejercicio, las obligaciones reconocidas hasta diciembre de 2022 fueron 13.590,31 millones, un 9% más que el gasto en 2021, cuando la cuantía se quedó en 12.468,64 millones. A su vez, el dato de 2021 es un 4,88% más elevado que los 11.887,97 millones de 2020, el año de la irrupción de la pandemia.
CRISIS SANITARIA
En este sentido, el estallido de la crisis sanitaria pudo contribuir a que en 2020 el repunte del gasto con respecto a 2019 fuera del 24,7%. Pero el aumento de este importe en IT por parte de la Seguridad Social no cogió fuerza solo en el año de la pandemia. En el mencionado 2019, el ascenso fue todavía mayor con respecto a 2018 (+27,29%).
Precisamente, 2018 fue el único año reciente en el que se produjo un descenso del gasto, con un discreto -1,33%, dado que la cifra en 2018 fue de 7484,78 millones, frente a los 7.586 millones de 2017.
En los años anteriores, se observa una tendencia al alza continuada, con 6.888,65 millones en 2016, 6.149,45 en 2015 y 5.472,71 en 2014. Así, por ejemplo, entre 2014 y 2022, el gasto se ha incrementado en más del doble (+148,33%).
CONSCIENTES DE SUS DERECHOS
Ante estas cifras, fuentes del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones explicaron a Servimedia que hay diferentes razones que están detrás de este repunte que, eso sí, comienza ya a estabilizarse en los últimos años. Entre estos motivos, apuntaron que los trabajadores son ahora más conscientes de sus derechos y también que se están registrando tiempos de espera mayores en el sistema sanitario, lo que alarga los procesos de baja.
Asimismo, subrayaron que están trabajando con los agentes sociales para desarrollar convenios con las Mutuas encaminados a efectuar pruebas diagnósticas y tratamientos terapéuticos y rehabilitadores en procesos de IT por contingencias comunes de origen traumatológico. Este punto fue pactado por sindicatos y patronal en el V Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC).
Por su parte, los mencionados interlocutores sociales tienen puntos en común, pero también discrepancias. Así, CEOE y CCOO coinciden en que “es normal” que con mayores niveles de afiliación a la Seguridad Social aumente cuantitativamente el número de bajas médicas y en que las mismas se alargan por el deterioro que ha sufrido en los últimos años el sistema sanitario en cuanto a tiempos de espera.
MUTUAS
Pero fuentes de CEOE insisten en que se debe dar un mayor peso a las mutuas en el tratamiento integral del paciente, incluida la posibilidad de conceder el alta médica. Por su parte, desde los sindicatos acotan este papel solo al proceso de recuperación en enfermedades traumatológicas, de forma voluntaria por parte del empleado y siempre reservando la potestad del alta al médico de la sanidad pública.
“Hay un deterioro muy fuerte del sistema de salud, lo que impide que a veces los procesos se puedan llevar a cabo con la celeridad necesaria”, declaró a Servimedia el responsable de Salud Laboral de CCOO, Mariano Sanz, que lamentó que “hay un montón de tiempos muertos” que ralentizan la recuperación.
Sanz criticó también que desde empresas y patronales se esté denunciando un aumento del absentismo injustificado por parte de los trabajadores, defendió que el “fraude es muy pequeño” y añadió: “Si hay algún caso de fraude, que caiga todo el peso de la norma y se le haga pagar”.
INJUSTO E INCORRECTO
“Intentar generalizar hablando de absentismo injustificado no solo es incorrecto, sino injusto”, prosiguió Sanz. Eso sí, reconoció que en época de bonanza económica la gente ejerce más sus derechos laborales porque no tiene tanto miedo a ser despedida.
“Pero es que eso es positivo. Lo que no puede ser es ir con miedo y estando malos a trabajar, porque eso es presentismo derivado del miedo al despido o a que no te renueven el contrato”, resolvió el responsable de Salud Laboral de CCOO.
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