MADRID, 29 (EUROPA PRESS)
La Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) ha advertido este miércoles de la “notable” desaceleración registrada por el excedente bruto de explotación en 2024, lo que está limitando a su vez las decisiones de inversión de las empresas pese al dinamismo mostrado por la economía española el año pasado.
Para la patronal, “la fortaleza de la economía en 2024 se explica por la recuperación del consumo privado y el vigor del consumo público”, mientras que la inversión aumenta, “pero sigue siendo la variable más retrasada en este ciclo de recuperación”.
En contraste con el repunte del PIB, la CEOE advierte de que el empleo se desaceleró, hasta situar su crecimiento en el 2,4%, frente al 3,2% anterior, en tanto que la productividad por ocupado creció, pero todavía se encuentra un 2,5% por debajo de los niveles de 2019, antes de la pandemia.
Frente a la desaceleración del excedente de explotación bruto, la organización empresarial destaca la “intensidad” del crecimiento de las rentas salariales, que fue superior al PIB nominal.
En el conjunto del año, CEOE resalta que el excedente de explotación bruto supuso el 41,9% del PIB, por debajo del 43,1% que representaba en 2019. En contraste, el peso en el PIB de la remuneración de los asalariados supera ya las cifras previas a la crisis y supone un 48,4% del total, frente al 46,7% de 2019.
De cara a 2025, CEOE considera que la incertidumbre sigue siendo elevada, aunque “el balance de los riesgos está en el lado positivo”. Por el lado exterior, la patronal apunta que el principal riesgo es el geopolítico, que puede dar lugar a incrementos de los precios de las materias primas.
En el ámbito interno, la organización empresarial señala que los principales riesgos “pueden llegar por una política económica que introduzca una mayor incertidumbre y genere mayores costes a la actividad empresarial, sobre todo en el mercado laboral”, frenando así decisiones de consumo e inversión.
En todo caso, la CEOE prevé que la mejora del crecimiento de la actividad en la última parte del año dé lugar a un avance del PIB superior al 2,5% en 2025.
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