MADRID, 11 (SERVIMEDIA)
El 59% de los hogares con menores de 12 años ha sufrido la presencia de piojos en los últimos tres años y hasta un 15% utiliza tratamientos “poco eficaces” para eliminarlos.
Así se desprende de una encuesta realizada por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), que destaca entre dichos tratamientos rociar la cabeza con vinagre o el uso de aceites esenciales y otros remedios “más o menos naturales”.
Los “más habituales” contra piojos y liendres son los champús, lociones y geles que funcionan como insecticidas y las siliconas, usados en un 64% de los hogares como método “principal” para eliminarlos.
La OCU subrayó que, según la evidencia científica, los “más eficaces” son los insecticidas a base de permetrina como principio activo, un tratamiento “relativamente rápido”, a su juicio, ya que bastan entre 10 y 15 minutos para que haga efecto.
Además, es un remedio barato, puesto que estos productos están a la venta a partir de 6,70 euros los 100 mililitros. No obstante, pueden causar irritaciones o reacciones alérgicas, no pueden usarse en menores de dos años y se empiezan a documentar “resistencias” de los piojos, según expuso la asociación.
Junto a ellos, señaló que las lociones, sprays y geles de siliconas con dimeticona o ciclometicona son también “muy eficaces” contra los piojos, pero “no tanto” contra las liendres, aunque el resultado “varía” según la marca.
La organización hizo hincapié en que bastan cinco minutos de aplicación o “incluso menos” para que hagan efecto, si bien su precio es “significativamente superior” al de un insecticida, ya que se venden a 15,30 euros/100 mililitros de media, y algunas marcas también “limitan” su uso a niños mayores de dos años.
UN 4% MÁS CAROS QUE EN 2021
La OCU explicó que, “en general”, estos productos han subido de precio respecto al año pasado un 4% de media y que es posible encontrarlos en forma de kit, de modo que el producto con el principio activo se acompaña de un champú, de una lendrera y un gorro y resultan, “por lo general, un poco más caros”.
La lendrera es, a su entender, “otra opción a tener en cuenta”, pero si va a ser el principal método que se utilice, como declaró el 17% de los encuestados, urge a “ser exhaustivo y dedicarle tiempo”.
Asimismo, puntualizó que los peines eléctricos son “caros” (23 euros de media) y que, aunque son “eficaces” contra los piojos, no lo son contra liendres, ya que sus púas “suelen ser demasiado cortas”.
Entre los tratamientos que refleja la encuesta, la OCU también se refirió a los que prestan los centros especializados en la eliminación de piojos, al que suelen recurrir “habitualmente” un 4% de las familias afectadas que respondieron a la encuesta.
La asociación matizó que se trata de métodos de aspiración o de aplicación de aire caliente que suelen combinarse con el uso de una lendrera y que su eficacia y su precio “puede variar mucho según el centro”.
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