MADRID, 15 (SERVIMEDIA)
El ministro de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, Pablo Bustinduy, pidió este miércoles en Bruselas a la Comisión Europea que actúe para “poner freno” a la desinformación y otros contenidos ilícitos que se publican en las principales redes sociales que operan en Europa y en España, como las que controlan Elon Musk (X, antiguo Twitter) y Mark Zuckerberg (dueño de Meta, en la que se integran redes como Facebook, Instagram y WhatsApp).
Así lo reclamó en el marco de su reunión con el nuevo comisario europeo de Democracia, Justicia, Estado de Derecho y Protección de los Consumidores, Michael McGrath, tras la cual, en declaraciones a los medios de comunicación, advirtió de que la democracia europea “no puede estar supeditada a los intereses de ningún magnate, sea Elon Musk, Zuckerberg o sea cualquier otra gran empresa tecnológica”.
Tras juzgar “absolutamente esencial” que Europa “reaccione para defender sus instituciones y su democracia”, el titular de Derechos Sociales y Consumo compartió su “enorme preocupación” por la “deriva de inestabilidad que recorre las democracias europeas, a menudo asociadas al hecho de que las grandes redes sociales se están convirtiendo en armas políticas para desestabilizar las democracias europeas y, en ocasiones, para servir abiertamente a opciones políticas antidemocráticas”, convencido de que “la soberanía digital es tan importante como la territorial”.
En este sentido, urgió a “no consentir” que estas plataformas se conviertan en “herramientas o instrumentos al servicio de la desestabilización de las democracias europeas”. “No puede ser que los caprichos o los intereses de un magnate o de una empresa tecnológica determinen la capacidad que tengamos de tener un debate público y una esfera pública que funcione como debe funcionar en una democracia”, apostilló.
“Lo que se me ha transmitido es que la Comisión Europea se toma este desafío muy en serio y que va a seguir actuando en esa línea”, agregó, al tiempo que dijo “confiar” en que “sea así porque nos va demasiado en ello, es demasiado importante”.
UNO DE LOS MAYORES RETOS
En paralelo, Bustinduy explicó también que conversó con McGrath de la eficacia de las medidas adoptadas en el seno de la Unión Europea para combatir la manipulación de la información que afecta a los usuarios de servicios digitales, a su juicio, “uno de los mayores retos que tiene la Comisión Europea para la legislatura que acaba de comenzar”.
“La Comisión tiene las herramientas suficientes para poner freno a la deriva de los grandes magnates de las redes sociales”, añadió, al tiempo que puntualizó que “es urgente” que la Comisión Europa “agilice” sus decisiones y concluya los expedientes ya abiertos, en referencia al procedimiento abierto por la Comisión en 2023 a la red social X porque habría infringido la Ley de Servicios Digitales en áreas relacionadas con la difusión de contenidos ilícitos.
Junto a ello, el ministro subrayó que Europa “se ha construido sobre el consenso del Estado de derecho y la protección de los derechos civiles y sociales” y reiteró que “ninguna empresa, por grande o poderosa que sea, debe tener la capacidad de alterar dicho orden”.
Durante su viaje a Bruselas, Bustinduy se reunió también con la vicepresidenta ejecutiva de la Comisión Europea y comisaria de Empleo de calidad, Derechos Sociales, Educación, Cualificación y Preparación, Roxana Mînzatu, y con la comisaria de Igualdad, Preparación y Gestión de Crisis de la Unión Europea, Hadja Lahbib para “examinar algunas de las prioridades de la nueva Comisión”.
LAS DOS MÁXIMAS PRIORIDADES
En estos encuentros, el ministro incidió en la necesidad de que la nueva Comisión Europea elabore una estrategia europea contra la pobreza, y, por otro, que haya una intervención a nivel comunitario en materia de vivienda, dos asuntos que, aseveró, “reflejan las dos máximas prioridades que tiene España en política social”.
A este respecto, afirmó que “es imprescindible que las instituciones europeas destinen fondos y recursos para combatir la exclusión social y la pobreza”.
En el transcurso de dichas reuniones, Bustinduy abordó, además, otros asuntos referidos a las desigualdades sociales y territoriales dentro de la Unión Europea y otras estrategias europeas como las de inclusión de personas con discapacidad o las de conciliación para la juventud europea y avanzó que el Gobierno de España “no va a abandonar la necesidad de seguir ampliando y desarrollando el pilar social del proyecto europeo”, que considera “un eje esencial para la defensa de la democracia europea en este tiempo de incertidumbres que nos ha tocado vivir”.
“Sin una dimensión de protección social, no será posible mantener ese proyecto de paz, de convivencia y de justicia social que Europa representa en el imaginario de su ciudadanía”, sentenció.
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