MADRID, 30 (EUROPA PRESS)
La junta militar de Burkina Faso ha impuesto desde este jueves el estado de emergencia en ocho regiones del país para reforzar las operaciones contra los grupos yihadistas, en medio de un intento de Uagadugú de hacer frente al repunte de los ataques terroristas durante los últimos años.
La decisión, adoptada por el Gobierno de transición, implica la declaración de esta medida en un total de 22 departamentos en ocho regiones, según el decreto publicado por la Presidencia de transición. Burkina Faso ya había decretado el estado de emergencia, si bien la disolución del Parlamento tras el nuevo golpe de Estado de septiembre de 2022 anuló la decisión, ahora reimpuesta en estas zonas.
La medida estará en pie durante 30 días, si bien podría ser prorrogada por el nuevo Parlamento. El líder de la junta, Ibrahim Traoré, aseguró la semana pasada que las autoridades trabajan “para la reconquista del territorio” y “el retorno de la paz” ante el recrudecimiento de los ataques por parte de grupos yihadistas, entre ellos las ramas regionales de Al Qaeda y Estado Islámico.
Traoré, ahora presidente de transición, encabezó en septiembre de 2022 una asonada que fue considerada un ‘golpe palaciego’ por parte de un sector de la junta militar enfrentado al hasta entonces líder de la junta instaurada tras el golpe de Estado de enero de ese año, Paul-Henri Sandaogo Damiba. Burkina Faso ha registrado un fuerte aumento de ataques yihadistas en los últimos años. Los abusos de las fuerzas de seguridad contra la población han ayudado a estos grupos en sus tareas de reclutamiento.
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