MADRID, 10 (SERVIMEDIA)
La comisaria europea de Igualdad, Helena Dalli, pidió este jueves al Grupo Social ONCE apoyo y colaboración para que la próxima presidencia española de la Unión Europea (UE), prevista para el segundo semestre de 2023, ponga en valor a los 80 millones de ciudadanos europeos con discapacidad y les ofrezca igualdad de oportunidades.
Dalli realizó estas declaraciones durante un encuentro celebrado en la sede de la Comisión Europea en Bruselas, donde conoció el modelo de igualdad del Grupo Social ONCE para lograr una sociedad con las mismas oportunidades de progreso.
La delegación del Grupo Social ONCE estuvo encabezada por su presidente, Miguel Carballeda, quien comprometió el esfuerzo de la organización española “por crear una Europa más social para las personas con discapacidad, que genere oportunidades iguales”. Asimismo, pidió a la comisaria que desde las instituciones europeas se trabaje en ese objetivo.
El vicepresidente del Grupo Social ONCE, Alberto Durán, solicitó además que la futura Conferencia ministerial sobre igualdad, prevista precisamente para noviembre de 2023 en Pamplona, incluya “un espacio para hablar de mujeres y discapacidad”.
Durán también expuso el trabajo que el Grupo Social ONCE lleva a cabo en asuntos tan relevantes a nivel continental como la puesta en marcha de la Tarjeta Europea de Discapacidad, la problemática del voto accesible en determinados países europeos, o la importancia de los Centros Especiales de Empleo en España.
Dada la experiencia de la ONCE en América Latina, reclamó aportar un componente social a la futura Cumbre de la Unión Europea y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), para crear un espacio en el que tratar la inclusión y los nuevos modelos de innovación social en la región.
IGUALDAD
La vicepresidenta del Grupo Social ONCE y presidenta del Observatorio de Igualdad, Patricia Sanz, fue la encargada de detallar cómo la organización trabaja en la inclusión de las mujeres con discapacidad en general y de aquellas que son víctimas de violencia de género en particular.
Desde hace más de cinco años, en el Grupo Social ONCE se trabaja de forma intensa para identificar a mujeres con discapacidad que hayan sufrido algún tipo de violencia, para poder ayudarlas y ofrecerles un empleo de calidad y con una retribución razonable, explicó Sanz.
Destacó que en Inserta (entidad de formación y empleo de Fundación ONCE), existe una bolsa de 4.500 mujeres con discapacidad víctimas de violencia de género, de las que 1.500 ya reciben apoyo psicológico y formación, y 450 trabajan en el Grupo Social ONCE.
Sanz explicó a Dalli cómo funciona el Observatorio de Igualdad de Oportunidades del Grupo Social ONCE, que nació en 2009 para analizar la situación de las mujeres, tanto desde la perspectiva de acceso a los servicios sociales como en su participación en los órganos políticos, de gestión y de representación sindical.
Señaló que de las más de 72.600 personas que trabajan en la actualidad en el Grupo Social ONCE, el 43% son mujeres, un dato que “demuestra que es posible tener un empleo en el mercado ordinario teniendo una discapacidad, junto a personas que no la tienen”.
En su opinión, es muy importante que la Estrategia Europea de Cuidados, presentada en septiembre por la Comisión Europea, y la futura Directiva para combatir la violencia contra las mujeres, no dejen al margen a aquellas que tienen algún tipo de discapacidad.
Al encuentro con la comisaria también asistieron el director de Relaciones Internacionales del Grupo Social ONCE, Javier Güemes; y la directora de la Oficina Técnica de Asuntos Europeos, Cristina Barreto.
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