MADRID, 30 (EUROPA PRESS)
El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, ha aseverado este lunes que tanto Líbano, como la región de Oriente Próximo y “el mundo” en su conjunto son ahora más seguros tras la muerte del líder del partido-milicia chií libanés Hezbolá, Hasán Nasralá, en un ataque israelí el viernes sobre Beirut.
“Hasán Nasralá fue un terrorista brutal cuyas numerosas víctimas incluyeron estadounidenses, israelíes, civiles de Líbano, civiles de Siria y muchos otros”, ha recordado el representante de la diplomacia estadounidense durante su intervención en una reunión con representantes de la coalición contra Estado Islámico.
“Durante su liderazgo de Hezbolá, el grupo aterrorizó a personas de toda la región e impidió que Líbano avanzara plenamente como país. Líbano, la región y el mundo están a salvo”, ha añadido Blinken, que ha asegurado que seguirá trabajando junto a sus socios para alcanzar una solución “diplomática” que brinde seguridad a Israel y Líbano.
En este contexto, Blinken ha destacado que Estados Unidos sigue comprometido con la necesidad de alcanzar un alto el fuego en la Franja de Gaza que permita la liberación de los rehenes secuestrados por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) y “alivie el sufrimiento de la población de Gaza”.
Así las cosas, y a pesar de los incesantes ataques de Israel tanto en Gaza como en Líbano en las últimas semanas, el secretario de Estado estadounidense ha insistido en que “la diplomacia sigue siendo el mejor y único camino para lograr una mayor estabilidad en Oriente Próximo” y que Washington está comprometido con “estos esfuerzos”.
Hamás lanzó el 7 de octubre una serie de ataques contra territorio israelí que se cobraron la vida de casi 1.200 personas y tomaron como rehenes a otras 240. El Ejército de Israel lanzó entonces una ofensiva contra la milicia islamista en la Franja de Gaza que se suma ya más de 41.600 muertos, en su mayoría mujeres y niños.
Por su parte, Hezbolá lanzó ataques al norte de Israel que causaron varios muertos y el desplazamiento de miles de personas. Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) recrudecieron su ofensiva contra la milicia libanesa a mediados de mes y han logrado ya acabar con gran parte de su cúpula, incluyendo la muerte de Nasralá.
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