La contrarreloj, con salida en el Port Olímpic, será de 14,6 kilómetros y pasará por puntos emblemáticos
La segunda etapa, de 181,3 kilómetros, saldrá de Mataró y será exigente y con final en alto
BARCELONA, 20 (EUROPA PRESS)
La ciudad de Barcelona aportará el espíritu olímpico, sus principales atracciones turísticas y también la dureza del alto de Montjuïc a las dos primeras etapas de La Vuelta 23 –una ronda española con salida en la capital catalana el 26 de agosto y llegada a Madrid el 17 de septiembre–, en una salida oficial con una crono por equipos para abrir boca y una segunda etapa, la primera en línea, con salida en Mataró y llegada al Estadi Olímpic de la ‘montaña mágica’.
La sede de la Fundació Barcelona Capital Náutica (Barcelona acogerá la Copa América 2024 de vela) fue el lugar elegido para desvelar el recorrido de las dos primeras etapas de La Vuelta 23. La primera (26 de agosto) será una contrarreloj por equipos de 14,6 kilómetros que saldrá desde el Port Olímpic (en un lugar todavía por detallar) y llegará a la avenida de la Reina Maria Cristina, a los pies de Montjuïc.
Y, en cuanto a la segunda etapa (27 de agosto), saldrá de Mataró (capital de El Maresme) y llegará a Barcelona, a la histórica puerta del Estadi Olímpic Lluís Companys que vio llegar al maratón en los Juegos Olímpicos de Barcelona 92, tras 181,3 kilómetros de un recorrido duro, con dos cotas de montaña (Coll de Sant Bartomeu de 3ª y Coll d’Estenalles de 2ª) y un final durísimo digno de un ataque final entre los más fuertes.
Según explicó la organización, la contrarreloj por equipos será “técnica y rápida a la vez” y pasará por lugares emblemáticos como la Sagrada Família, el Passeig de Gràcia, la Torre Glòries o la Avinguda Diagonal. La salida será en el Port Olímpic para dar presencia a esa futura Copa América, aunque el lugar exacto no será desvelado hasta más adelante, pero será “muy especial” según apuntó el concejal de Deportes de Barcelona, David Escudé.
La segunda etapa de la siguiente ronda española será “dura”. Tras salir de Mataró, se pasará por el Vallès para ir en dirección a Manresa, pasar cerca de la emblemática montaña de Montserrat y ya de vuelta se pasará por el Baix Llobregat, camino de Barcelona. Ya en la ciudad, se subirá al alto de Montjuïc y se dará una única vuelta, sin usar el circuito que sí destaca en la Volta a Catalunya. Pero será un final de infarto que será el juez de esta segunda etapa, de 181,3 kilómetros.
El director general de La Vuelta, Javier Guillén, presidió la presentación de estas dos primeras etapas de una Vuelta que, de la mano de Barcelona, estará todavía más entre las grandes. “Barcelona es una necesidad. Para ser grande te tienes que asociar con los grandes y Barcelona es una de las ciudades más grandes del mundo, y reúne los cuatro pilares; deporte, sostenibilidad, tradición y vanguardia. Y viendo la crono inicial, es lo que me sugiere”, apuntó.
Una crono inicial que será por equipos porque, además de por motivos técnicos, es cada vez menos habitual en el calendario de UCI WorldTour. “Estamos en Barcelona dos etapas, y son dos etapas bien diferentes. La crono por equipos es muy plástica y hay muy pocas en el calendario. Y la segunda etapa, con salida en Mataró, sumamos más gente. Nosotros nos acercamos al espectador, no al revés”, comentó Guillén.
En esa segunda etapa, larga y dura, se podría pasar por el interior del Circuit de Barcelona-Catalunya, trazado que acoge la Fórmula 1 y MotoGP entre otros grandes eventos. “Apuesto a que sí que se podrá hacer, pasar por el Circuit de Barcelona-Catalunya. Estamos en negociaciones, pero no se puede confirmar todavía”, señaló a Europa Press.
Por su parte, Fernando Escartín, exciclista y director técnico de La Vuelta, aseguró que fue “relativamente difícil” diseñar las dos etapas en Barcelona –que acoge una salida y dos finales de etapa–, pero matizó que dentro de todo fue “fácil” por la ayuda del Ayuntamiento. “A los puristas les gustaría una crono más separada de la ciudad y de más fuerza, pero tenemos que acercar la competición a la gente y en esos 14,6 kilómetros estará todo apretado, que es mejor para la competición”, valoró.
En la presentación estuvieron los exciclistas Melcior Mauri (“Aplaudo que se recupere una crono por equipos, pienso que es muy atractivo para la carrera”), Roberto Heras (“Me siento medio barcelonés y estoy contento de que la ciudad acoja la salida. La segunda etapa irá por una zona ratonera y la llegada a Montjuïc es una llegada en la que apuesto que llegará un grupo reducido”) y Joaquim ‘Purito’ Rodríguez (“Será una segunda etapa muy dura, seguramente se romperá la carrera con el repecho de cara a meta que será muy selectivo. Etapa ratonera, seguro”).
El primer teniente de alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, aseguró que les hace “mucha ilusión” ser salida oficial de La Vuelta 23. “Quiero agradecer el trabajo hecho desde Deportes del Ayuntamiento y desde La Vuelta. Conseguimos volver a poner a Barcelona en el centro de las grandes competiciones nacionales e internacionales, con La Vuelta, el World Padel Tour y la Copa América”, rememoró.
“Jugamos a fondo para tener la salida de La Vuelta y ha salido bien. Pude estar en el final de La Vuelta 22 en Madrid y es impresionante ver como una ciudad sale a la calle. Y Barcelona hace una apuesta muy importante por la bicicleta como medio de transporte y es coherente que la ciudad tenga una salida de La Vuelta”, apuntó. “Tiene su morbo y su gracia que La Vuelta 23 salga de Barcelona y llegue a Madrid, por esa rivalidad deportiva que hay”, añadió.
Por su parte, el alcalde de Mataró, David Bote, aseguró que ser salida de etapa en La Vuelta es una “excelente oportunidad” para la ciudad. “Estamos muy agradecidos. Y de la buena relación con el Ayuntamiento de Barcelona sale la oportunidad de tener esta etapa, entre dos ciudades unidas en la historia por el primer ferrocarril o con el maratón de los Juegos Olímpicos de Barcelona 92, con salida en Mataró”, rememoró.
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