Bakú tilda de “infundadas” las acusaciones y carga contra Ereván por “hacer que el pueblo sea víctima de sus torpes políticas”
MADRID, 29 (EUROPA PRESS)
El Gobierno de Armenia ha acusado al Ejército de Azerbaiyán de “graves violaciones del régimen de alto el fuego” con el objetivo de socavar las posibilidades de éxito de los contactos a nivel bilateral para alcanzar una solución diplomática al conflicto.
El Ministerio de Exteriores armenio ha señalado en un comunicado que las Fuerzas Armadas azeríes llevaron a cabo ataques el miércoles contra territorio armenio, causando tres bajas, un balance confirmado por el Ministerio de Defensa de Armenia.
“La reciente provocación llevada a cabo por Azerbaiyán en continuación de su agresión a gran escala contra la integridad territorial de Armenia el 13 de septiembre supone un desprecio claro a los llamamientos de la comunidad internacional y los estados miembro del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas para mantener el alto el fuego”, ha sostenido.
“Esto es una reafirmación de las alertas por parte de Armenia de que Azerbaiyán intenta continuar su política de uso de la fuerza y maximalismo”, ha dicho, antes de recalcar que Bakú “busca afectar la reunión de los ministros de Exteriores de ambos países, cuya organización está bajo discusión”.
Así, ha pedido a la comunidad internacional “pasos efectivos” y la activación de “Mecanismos relevantes” para hacer que Azerbaiyán “cumpla estrictamente” el alto el fuego, lograr la retirada de sus fuerzas de territorio armenio y “evitar nuevas agresiones”.
En respuesta, el Ministerio de Exteriores azerí ha tildado de “infundadas” las acusaciones de Ereván y ha manifestado que esto “demuestra claramente que Armenia busca el objetivo de empeorar la situación en la región”.
De esta forma, ha acusado a las Fuerzas Armadas armenias de abrir fuego contra sus posiciones durante la jornada del miércoles, hiriendo a un militar. “En respuesta a la provocación por parte de Armenia, que violó el alto el fuego, el Ejército azerí adoptó medidas adecuadas”, ha explicado.
“No hay duda de que las provocaciones del lado armenio, que hace tiempo adquirieron el carácter de tradición, tuvieron lugar adrede en la víspera de la próxima reunión de alto nivel”, ha indicado, antes de acusar a Armenia de “jugar al mismo juego y hacer que el pueblo sea víctima de sus torpes políticas”.
“Está claro que es otro pretexto de Armenia para afectar el proceso de negociaciones. La cúpula de Armenia no debería agravar la situación en la región, no debería plantear reservas al proceso de negociaciones, debería detener la práctica de acusar a la comunidad internacional y debería sentarse en la mesa de negociaciones”, ha recalcado.
Por último, ha defendido que Bakú “es el que ha puesto en marcha la agenda de paz con la apertura de comunicaciones de transportes en la región y la materialización de trabajos de reconstrucción a gran escala en los territorios liberados de la ocupación”.
“Azerbaiyán no está interesado en crear tensiones en la región, pero cualquier provocación contra nuestro país será evitada de forma decidida”, ha zanjado el Ministerio de Exteriores azerí a través de un comentario publicado a través de su página web.
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