COSTA TEGUISE (LANZAROTE), 27 (EUROPA PRESS)
La presidenta del Congreso de los Diputados, Francina Armengol, ha subrayado este lunes que “no” se puede dejar que Mediterráneo y Atlántico se conviertan en un “cementerio de vidas humanas” ante el fenómeno migratorio.
Por ello, en la clausura de la reunión de presidentes de parlamentos del Sur de la UE y del Norte de África, celebrada en Lanzarote, ha abogado por seguir trabajando conjuntamente, en un ambiente de reflexión conjunta, de debate, de visiones, “a veces diferentes, pero de acuerdos al final”.
Armengol señaló que entre las conclusiones alcanzadas en este encuentro centrado en el fenómeno de la migración, está el que la migración irregular “no sólo es una cuestión” del país al que le llega en primera instancia la persona, sino que se debe coger con “todo el interés de todos” los países.
Entre las conclusiones, dijo, está el que es una “prioridad” reflejar el enfoque integral sobre el fenómeno migratorio “basado en la cooperación entre los países de origen, tránsito y destino”, que debe partir de una consideración “constructiva de la realidad migratoria como oportunidad para todos” los países afectados.
En este sentido, matizó que el fenómeno migratorio ayuda a mejorar las sociedades, si bien consideró que esto se debe explicar “desde la pedagogía y la colaboración entre los países”, puntualizando que los parlamentos tienen “esa obligación de hacer pedagogía no sólo con el migrante que llega, sino con el ciudadano que recibe” para ser una sociedad inclusiva aunque “sin negar los enormes” retos que supone la migración que “es constante y que es continuada” en algunos territorios.
Por ello, ha señalado que se incidió en la búsqueda de acciones concertadas, así como en la solidaridad y la responsabilidad compartidas, en la “inversión necesaria en políticas de acogida e integración” de las personas migrantes, en el respeto a los derechos humanos de todos los migrantes, así como al derecho internacional y, “de una forma muy especial, para los menores.
Además se refirió a la necesaria labor pedagógica que desde las instituciones se consiga trasladar a la sociedad sobre los beneficios de la migración legal para “combatir las campañas de racismo, de xenofobia, de antidemocracia que se alimentan desde algunos sectores”.
Con el objetivo de continuar este trabajo, Armengol avanzó que entre los días 3 y 5 de abril, representantes de parlamentos de todos los estados miembros de esta Asamblea de Unión por el Mediterráneo celebrarán en Granada un encuentro para seguir profundizando sobre los retos de la migración y centrarse en las principales causas de los movimientos migratorios.
Finalmente, la presidenta del Congreso quiso resaltar que se ha elegido Lanzarote para celebrar esta reunión con el fin de explicar que España, que es un país mediterráneo, también tiene una ruta atlántica y que se puede compartir entre todos las soluciones que se necesitan y, evidentemente, el sentir unánime de que el fenómeno migratorio afecta a todos “en la parte positiva y en la parte más dificultosa y más compleja que también existe”.
Asimismo subrayó que Lanzarote, que es una isla de 164.000 personas, y donde el 44 por ciento de sus ciudadanos son de origen europeo, un 19,4 por ciento americanos, un 11,9 por ciento de origen africano y un 6 por ciento de origen asiático, ha enseñado “muchas cosas en estos 30 años”, por lo que consideró que hay que aprender de islas como esta.
En concreto, resaltó que un territorio “pequeño está lleno de gente que viene de todo el mundo y han sido capaces de hacer de eso una riqueza cultural importante, una riqueza de la diversidad, de la convivencia, del saber estar, y siendo conscientes que evidentemente hay problemas” y es ahí donde “tiene que estar no solo todo el Gobierno de España, no solo todas las comunidades autónomas”, sino también “toda la Unión Europea”.
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