MADRID, 21 (SERVIMEDIA)
Airbnbn reivindicó este martes el papel de los alquileres de temporada y advirtió que imponer medidas de manera apresurada podría resultar en altos costes para las familias, dañar el desarrollo de áreas rurales y poner en riesgo una actividad que genera el 2% del PIB y 400.000 empleos.
“Para evitar que estas restricciones afecten de manera desproporcionada a familias, zonas rurales y pequeños negocios locales, reclamamos que las normativas en España sean efectivas, estén basadas en datos y sean proporcionales”, indicó la plataforma dedicada al alquiler turístico en una nota de prensa. Asimismo, pidió que “se deje de señalar a esta actividad como el chivo expiatorio de los grandes desafíos de la vivienda y permita a las familias y áreas rurales beneficiarse del turismo”.
Airbnb reconoce que algunas ciudades y destinos en España tienen en el turismo de masas “un enorme desafío” y se alinea con los gobiernos en la intención de aliviar la crisis de vivienda pero considera que han centrado sus normativas en limitar los alquileres de corta duración sin tener en cuenta consideraciones importantes, como la ubicación o el tipo de actividad. “Esto se ha traducido en prohibiciones generales en algunas ciudades, regulaciones regionales restrictivas amplias o una burocracia excesiva que está expulsando a quienes realizan esta actividad de manera ocasional, principalmente familias, sin resolver ninguno de los problemas”, señaló la plataforma.
Además, propuso medidas como establecer una distinción clara entre las actividades empresariales a través de alquileres turísticos dedicados únicamente al alquiler de corta duración y el hospedaje ocasional en los hogares de las familias; un sistema de registro único, armonizado, gratuito y en línea; según la normativa de la UE: imponer reglas basadas en evidencias y datos, proporcionadas, no discriminatorias y justificadas e incluir regulaciones adaptadas a las necesidades de áreas menos frecuentadas y conocidas, típicamente rurales, en contraste con la complejidad de los ámbitos urbanos, y que promueven la dispersión de los viajes por toda España.
También señaló que solo el 22 % del gasto turístico fue directamente de los anfitriones, mientras que el resto está vinculado directamente con la actividad que se genera en comercios de proximidad, restaurantes, transportes, eventos, y ocio en general. “Las restricciones excesivas impuestas a los alquileres de corta duración no solo serán perjudiciales para los anfitriones, sino también para el desarrollo rural y la actividad comercial en pequeños negocios locales” indicó la plataforma, quien aseguró que estas medidas perjudican el turismo familiar que simplemente busca encontrar alojamiento asequible en zonas no masificadas, dañando la competitividad de España como un destino familiar.
DIVERSIFICACIÓN
Airbnb recordó que, según datos recientes de Eurostat, existe una tendencia en la distribución de la oferta de alquileres de corta duración en España desde los focos turísticos tradicionales hacia regiones más pequeñas y menos visitadas. “Al fomentar que los viajeros exploren áreas urbanas menos visitadas, los alquileres de corta duración pueden reducir el impacto medioambiental del turismo y estimular las economías locales y el empleo en áreas menos conocidas, donde la oferta hotelera tradicional es insuficiente, aliviando al mismo tiempo la congestión en ubicaciones tradicionalmente más populares”, apuntó la plataforma, quien indicó que en los tres primeros trimestres de 2024 los turistas que escogieron Airbnb se dispersaron en más de 5.200 ciudades y pueblos en España, promoviendo la diversidad del turismo y ayudando a descubrir nuevos destinos.
También indicó que estas limitaciones regulatorias sí que están contribuyendo a que la economía turística española dependa principalmente de cadenas hoteleras internacionales, concentradas en determinadas áreas urbanas y de la costa, que alimentan el turismo de masas y elevan los precios de los alojamientos para los viajeros, con pocos o ningún beneficio para las familias locales.
“Airbnb comprende que pueden existir ciertas áreas populares entre los turistas en las que hay viviendas que se dedican exclusivamente al turismo y que constituyen una parte relevante de la oferta total de vivienda. En los casos donde los datos muestran que eso es así, Airbnb está dispuesta a trabajar con los gobiernos para hacer cumplir regulaciones específicas allí donde esté justificado”, indicó el director General de Airbnb Marketing Services, Jaime Rodríguez de Santiago.
CONTRA LOS HOTELES
Por último, Airbnb denunció que el lobby de los hoteles se ha esforzado en trasladar el mensaje de que los alquileres de corta duración son la principal causa de la escasez de vivienda, masifica la ciudades y perturba los vecindarios. “En respuesta, algunas autoridades han implementado regulaciones estrictas sobre esta actividad, a menudo de manera reactiva e ignorando los datos reales sobre la enorme huella que los hoteles dejan allí donde están presentes, la mayoría áreas ya abarrotadas por su propia oferta”, denunció la plataforma, quien aseguró que los datos de Eurostat muestran que los huéspedes en Airbnb representan una pequeña proporción de visitantes a las principales ciudades de Europa y están creciendo en áreas rurales, mientras que los hoteles “están manteniendo o en algunos casos aumentando su presencia en los principales centros urbanos europeos y desencadenando el turismo masivo”.
“En ciudades como Ámsterdam, que han restringido severamente los pisos turísticos debido a preocupaciones de sobrepoblación, no han podido detener a los visitantes, quienes simplemente encontraron otras opciones de alojamiento. A pesar de esta regulación, y una disminución en las noches de huéspedes en viviendas turísticas en la ciudad desde 2019, el número total de turistas ha aumentado un 12 % de 2019 a 2023”, lamentó la compañía
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