MADRID, 2 (EUROPA PRESS)
Cuando se cumple algo más de un año desde que entrara en vigor de la ley que eliminó la incapacidad judicial de las personas con discapacidad, la Fundación Aequitas señala que este colectivo es ahora “dueño de su futuro”.
En declaraciones a Europa Press, ante la celebración este sábado 3 de diciembre del Dia Internacional de la Discapacidad, el director del Área Social de la Fundación –que asesora y acompaña a quienes se benefician de esta norma– Federico Cabello de Alba, ha explicado que esta medida ha supuesto “un cambio normativo” pero, también “de mentalidad” para “asumir un nuevo paradigma de la discapacidad”.
En este sentido, ha señalado que esta situación no ha afectado solo al propio colectivo, sino también a los profesionales del derecho y a las familias de los beneficiarios.
TRABAJANDO DESDE 2006
Tal y como ha explicado, desde el momento de aprobación de la Convención sobre los derechos de las personas con discapacidad, allá por el año 2006, la labor tanto de Aequitas como del resto de las instituciones que trabajan en este tema ha consistido principalmente en la difusión y formación en cuanto al contenido de la convención entre el movimiento asociativo y las personas con discapacidad. También ante la Administración, el Poder Legislativo, con diversas comparecencias en las cámaras legislativas o en la formación de otros operadores jurídicos y agentes sociales.
Gracias a ello, se consiguió la eliminación de la “sustitución” de la persona por “el necesario respeto a su voluntad, deseos y preferencias” y la supresión en el Código Civil del “procedimiento y concepto de incapacitación”.
Es por esto que, tal y como ha indicado Cabello de Alba, las personas con discapacidad, o sin necesidad de concurrir la discapacidad que necesitan apoyo, son ahora “dueñas de su futuro”.
INTERÉS POR EL NUEVO SISTEMA
De hecho, ha explicado que en las notarías de la Fundación “es cada vez más frecuente” que personas que antes estaban incapacitadas judicialmente “se interesen por el nuevo sistema”. Además, según ha indicado, se dan con mayor frecuencia instituciones específicas como la designación notarial de apoyos, la autocuratela o el guardador de hecho, entre otras.
También hay una mayor implicación de las familias, según ha indicado Manuel María Rueda, directo de la Sección Jurídica de Fundación Aequitas. “Hay un gran interés en el conocimiento del nuevo sistema de organización de la asistencia a las personas con discapacidad”, ha reconocido.
Aún así, los expertos aprecian “cuestiones técnicas que habría que corregir”. “Pero esto no debe empañar el hecho de que se ha conseguido una adaptación al mandato de la Convención, y esta respondía a las demandas del Tercer Sector”, ha advertido Rueda.
A su juicio, habrá que esperar a la aplicación mayoritaria de la ley para determinar si hay que cambiar algo. “No obstante, debería ir acompañada de la adaptación de las demás leyes, no estrictamente civiles, a la Convención y a las nuevas figuras de apoyo a las personas con discapacidad. Vamos a desarrollarla y aplicarla en vez de pensar en cambiarla ya”, ha concluido.
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