La sociedad construye convenciones que muchas veces pasan desapercibidas. Hasta el siglo XIX, el blanco era el color predominante para vestir a niñas y niños por razones prácticas. Curiosamente, el rosa fue en su momento un color asociado a los hombres, especialmente a los infantes de la realeza. Esta división de colores basada en el género es un ejemplo de cómo las normas sociales se imponen de forma arbitraria.
Territorio Violeta toma su nombre del violeta, una mezcla simbólica del rosa y el azul, que representa la unión y el entendimiento entre mujeres y hombres. Este concepto sirve como base para una empresa que utiliza el teatro y las artes escénicas como herramientas para cuestionar estereotipos y promover la igualdad.
Igualdad como Motor de Cambio
Territorio Violeta se compromete a hacer del teatro un espacio de reflexión y cuestionamiento social. La igualdad no es solo un objetivo, sino el eje central de su actividad. A través de sus iniciativas, invitan tanto al público como a los programadores a explorar nuevas narrativas que desafíen las normas establecidas y fomenten una visión más equitativa de la sociedad.
Festival Territorio Violeta
Origen y propósito
El Festival Territorio Violeta, creado en 2018, selecciona y visibiliza espectáculos paritarios que promueven la igualdad de género. Este festival no solo evalúa la calidad artística de las obras, sino también el enfoque desde el que se presentan. Con una programación diversa y equilibrada, se posiciona como un referente en las artes escénicas comprometidas con la igualdad.
Principales desafíos
El festival afronta retos significativos en la promoción de espectáculos igualitarios:
- Falta de perspectiva igualitaria: Muchas programaciones carecen de una mirada inclusiva, lo que limita la presencia de obras paritarias.
- Baja visibilidad: Los espectáculos con mensajes igualitarios suelen pasar desapercibidos si no se destacan específicamente.
- Programación limitada: A menudo, estas obras se concentran en fechas específicas como el 8 de marzo, resultando en una oferta monótona y predecible.
Nos acompañan en la contracorriente violeta
El Festival Territorio Violeta ha encontrado apoyo en sedes clave como el teatro Real Coliseo Carlos III en San Lorenzo del Escorial, que se ha convertido en un punto de referencia desde la tercera edición. A partir de 2025, compartirá sede con el teatro de la Cabrera.
Sin embargo, la búsqueda de sedes es un desafío continuo, especialmente ante las fluctuaciones políticas que afectan la estabilidad de eventos en localidades como Córdoba o Santander. Las extensiones del festival permiten que municipios pequeños participen durante todo el año, ofreciendo alternativas accesibles para aquellos que no pueden asumir una programación completa.
Espacios actuales en Extensión FTV incluyen:
- C.C. Paco Rabal y Pilar Miró (San Fernando de Henares, Madrid)
- Parla (Madrid)
- Utebo (Zaragoza)
- Teatro Jovellanos (Gijón, Asturias)
- Varias localidades en Córdoba y otras provincias.
Corriente o contracorriente
Territorio Violeta invita a unirse a la contracorriente violeta, un movimiento que desafía las normas sociales para avanzar hacia una sociedad igualitaria. La campaña “HACER QUE SE PUEDA” pone en evidencia la baja representación de las mujeres en las artes escénicas, pero también muestra que el cambio es posible con el compromiso colectivo.
El Festival Territorio Violeta es más que un evento: es una plataforma para la transformación social. A través del teatro y las artes escénicas, visibiliza historias que promueven la igualdad y desafían los estereotipos. Unirte a esta contracorriente violeta significa ser parte de un cambio real en la sociedad. ¿Te sumas?
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