MADRID, (EUROPA PRESS)
La nadadora Mireia Belmonte reconoce, al hacer repaso de 2022, que a pesar de estar seis meses sin entrenar, tras los Juegos Olímpicos de Tokio en 2021, que ha sido “un buen año” con el cambio de entrenador y las nuevas formas de trabajar a las que tuvo que acostumbrarse.
“Ha sido un año de cambios. Cambié de entrenador y cambié de método de entrenamiento. Así que bueno, ha sido un año para acostumbrarme a nuevas formas de trabajar. Al final pude ir a un Europeo, donde creo que hice una buena actuación, a pesar de estar seis meses sin entrenar después de los Juegos Olímpicos. Creo que ha sido un buen año”, indicó la deportista en una entrevista a Europa Press.
Tras un año de ausencia del escenario internacional -desde Tokyo 2020-, la española reapareció en los campeonatos continentales de Roma el pasado mes de agosto, donde no pudo alcanzar ninguna final, pero que le sirvió de puesta a punto. “Siempre hay que saber de dónde vienes. Por mucho que consigas tienes que saber que lo has conseguido con esfuerzo y dedicación, porque nadie te ha regalado nada”, expresó.
Los Juegos Olímpicos de París 2024 son el gran reto de la de Badalona, donde intentará sumar a su casillero personal alguna medalla más, tras las conseguidas en Londres 2012 (plata en 200 metros mariposa y otra plata en 800 libre) y Río de Janeiro 2016 (oro en 200 mariposa y bronce en 400 estilos).
Sin embargo, Belmonte se centra en 2023 y en hacer un buen papel en los Campeonatos del Mundo de Japón, que tendrán lugar el próximo mes de julio. “Ojalá saber lo que me deparará el 2023. Espero tener muchos éxitos y sobre todo tengo ganas de seguir mejorando. Este año tenemos el Campeonato del Mundo de Fukoka en Japón y mi objetivo es llegar a la marca mínima para poder llegar a esa prueba”, zanjó.
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