MADRID, 21 (SERVIMEDIA)
La secretaria general de Deportes de la Generalitat de Cataluña, Anna Caula, pidió este lunes la “dimisión” del presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, por el beso en la boca que dio a la jugadora de la selección española de fútbol femenino Jennifer Hermoso al celebrar el triunfo en el Mundial celebrado en Australia.
En declaraciones a Catalunya Radio recogidas por Servimedia, Caula se mostró así de contundente respecto a la polémica social que ha generado el gesto del presidente de la Federación con una de las principales jugadoras del equipo nacional.
“Rubiales tiene que dimitir”, dijo Caula respecto a lo que considera una “agresión dura” de Rubiales por agarrar la cabeza de la jugadora con las dos manos y acercarla a su cara para besarla en la boca en medio de las celebraciones por el título mundial.
“Hay que tomar conciencia de que hay cosas que no son un precio que debamos pagar. La mirada en el fútbol aún no es igualitaria, nos queda mucho trabaja por hacer”, agregó la responsable catalana, quien insistió por ello en que las jugadoras no deben “tolerar ni pagar ningún precio por ser deportista de élite”.
Además, señaló que al presidente de una organización tan relevante como la RFEF le “corresponde ser escrupuloso con las formas” y censuró que tanto su comportamiento en el estadio como sus declaraciones posteriores insultando a quienes le han criticado sólo llevan a “normalizar actitudes que no son aceptables”.
Estas palabras de la directora de Deportes de la Generalitat van en la misma línea del ministro de Cultura y Deporte, Miquel Iceta, quien esta mañana también tachó de “inaceptable” el beso en la boca de Rubiales, por lo que le conminó a dar “explicaciones” y a presentar sus “disculpas”.
Iceta declaró en una entrevista en RNE recogida por Servimedia que es “inaceptable” el beso de Rubiales a Jennifer Hermoso, máxime cuando ayer se vivió en Sídney un triunfo histórico que representa “un momento de igualdad, de derechos y de respeto hacia las mujeres”. Por ello, subrayó que “todos debemos ser especialmente cuidados en nuestras actitudes y acciones”. “Todos merecemos un respeto”, remachó.
La ministra de Igualdad, Irene Montero, ayer mismo ya manifestó en sus redes sociales tras el partido que dar un beso sin consentimiento “es una forma de violencia sexual que sufrimos las mujeres de forma cotidiana y hasta ahora invisible, y que no podemos normalizar”. “Es tarea de toda la sociedad. El consentimiento en el centro. Solo sí es sí”, remachó.
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