El pivote asturiano reconoce que “hay ganas” de devolver a Suecia la derrota hace un año en la final europea
MADRID, 28 (EUROPA PRESS)
El jugador de la selección española de balonmano Abel Serdio abraza los nervios que ha sentido en su primer Mundial y que sentirá este domingo en la lucha por el bronce contra Suecia, la señal inequívoca de “partido importante” junto a unos ‘Hispanos’ que se han ganado “toda su repercusión” como fijos en las medallas.
España tiene en Estocolmo (18.00) otra cita con un podio, la que sería su décima medalla en los últimos 12 años. “Poco más que decir, lo dice todo. Si el nivel de repercusión de los ‘Hispanos’ ha ido aumentando es por este tipo de cosas. Hay poco que decir cuando se consiguen tantas medallas y quizá siendo una de las tapadas siempre en los campeonatos. Eso demuestra el gen que tiene esta selección”, comenta el asturiano en una entrevista con Europa Press.
Para el jugador del Wisla Plock, la cita justo en Polonia, anfitriona del Mundial junto a Suecia, ha supuesto su primera convocatoria para un gran torneo, una “experiencia” que “vale una barbaridad”. “Soy nuevo aquí. La sensación del partido contra Noruega, ese nerviosismo que sientes hasta el final. Dinamarca, igual. Te estás jugando el pase a una final y sientes esos nervios que son buenos, son parte del deporte. Si tienes un partido y estás nervioso es bueno porque es un partido que sientes que es importante”, explica.
El camino de los ‘Hispanos’ tuvo ese momento para la historia ante Noruega, con el pase a semifinales tras dos prórrogas, pero chocó con la doble campeona Dinamarca perdiendo la opción de pelear por un tercer título mundial. Los de Jordi Ribera tuvieron que viajar esa misma noche y compartir avión con sus verdugos mientras trataban de borrar el mal recuerdo para pensar en el bronce, el metal que defienden tras Egipto 2021.
“En los momentos después del partido, que ves que se te ha escapado, te sientes muy mal. Ves que has tenido una oportunidad y no la has conseguido. Yo, al ser principiante, luchar por un bronce es un gran premio. Gente con más experiencia está más jodida, pero el ambiente es bueno. Nos vamos a recuperar bien y vamos a demostrar que somos candidatos a ganar el bronce”, relata.
El pivote español, que confiesa también los problemas de una organización compartida en esos viajes que complican todo, desvela además una conversación con Dani Sarmiento, ‘Hispano’ ilustre y compañero en el Wisla Plock. “Conseguir un bronce ayuda a quitar todas las penas del partido de la semifinal. Terminas en el podio y lo ves todo diferente”, cuenta así la arenga, con el objetivo claro antes de volver a casa.
“Se nota todo lo que ves por redes sociales y el apoyo que te demuestran tus familiares, la gente que escribe. Se nota que la gente se vuelca con el balonmano, quizá no tanto como en otros países. En los últimos años los ‘Hispanos’ han conseguido cosas muy grandes, no es fácil. No todo el mundo repite. Toda la repercusión que tenga la selección masculina de balonmano es bien merecida”, añade sobre la repercusión del equipo.
¿REVANCHA CONTRA SUECIA? “SÍ, HAY GANAS”
Francia, Noruega, Dinamarca y ahora Suecia, todos viejos conocidos, sospechosos habituales con España de nuevo ante un reto mayor. “Te podía tocar Francia que era otro hueso duro, pero es verdad que jugar contra Suecia, en su casa, de primeras se ve muy difícil, pero confiamos en nosotros mismos. Hemos demostrado que hemos competido muy buenos partidos. Suecia va a ser igualmente un rival muy duro, esperemos que el hándicap de jugar en su casa no nos pese”, apunta sobre el duelo por el bronce en el Tele2 Arena.
Estocolmo sirve además la opción de revancha para unos ‘Hispanos’ que hace un año perdieron ante Suecia la final del Europeo, cuando buscaban un tercer título seguido. “Sí, un poco sí (ganas de revancha). Yo ese lo viví desde fuera, pero sí, hay ganas, devolverles un poco de la desilusión que provocó en el grupo el año pasado perder contra ellos. Es más reciente y si conseguimos el bronce será poner un buen broche a este Campeonato”, confiesa sin pensarlo.
Del mismo modo, la baja del principal culpable de aquella derrota, un Jim Gottfridsson que se fracturó un dedo en cuartos de final, puede ser algo a favor de los de Ribera. “Siempre ayuda que uno de los mejores centrales del mundo esté lesionado, pero esto pasa siempre. Se lesiona el que parece que es el cabecilla y llega otro y lo hace igual o mejor. Suecia tiene muchas armas, da igual quién esté en el campo”, explica con cautela.
Por último, Serdio, “contento” a nivel personal por superar sus “expectativas” con protagonismo en “minutos importantes”, declara su admiración a los ‘Hispanos’. “Desde hace unos años, Jordi hizo un gran trabajo de base. Los últimos años la gente se va fuera a ligas más fuertes y esa experiencia en el extranjero te ayuda en estos Mundiales y torneos a competir a un mayor nivel. El equipo que tenemos, la amistad, es una de las claves”, termina.
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