La consellera de Sanidad Universal y Salud Pública, Ana Barceló, ha recordado que la Comunitat Valenciana fue pionera en acordar la financiación del sistema de monitorización flash de glucosa para menores de 4 a 18 años con diabetes mellitus tipo 1 con motivo de la conmemoración, este miércoles, del Día Mundial de la Diabetes.
Desde que la Conselleria empezó a financiar este tipo de dispositivos de medición de glucosa, hace aproximadamente un año, son ya 1.400 los menores que se han beneficiado de la medida, que ha supuesto una inversión cercana a los 1,8 millones de euros para el departamento que dirige Barceló.
“Gracias a esta decisión, se ha dotado a los afectados de una herramienta para mejorar el control de su diabetes, reducir los problemas derivados de las hipoglucemias y aportar tranquilidad a pacientes y familiares al disponer de un sistema de medición de glucosa seguro que, sin pinchazos en los dedos, permite conocer el nivel de glucosa en cualquier momento”, ha explicado la titular de Sanidad.
Los datos los ha dado a conocer la consellera tras apuntar que en la Comunitat Valenciana esta enfermedad crónica está presente en el 8% de la población, con un total de 402.742 personas afectadas, de las que 18.000 tienen diabetes mellitus tipo 1 y el resto diabetes tipo 2. “No obstante -ha matizado- se calcula que 300.000 valencianos pueden sufrir diabetes y desconocerlo”.
Por provincias, los datos más recientes señalan que el número de personas con dibetes en Castellón es de 43.597. En la provincia de Valencia son 213.991 las personas afectadas, mientras que en Alicante son 145.154.
Entre las acciones llevadas a cabo desde la Conselleria de Sanidad Universal y Salud Pública para atender las necesidades de las personas con diabetes, contempladas todas ellas en la Estrategia de Diabetes de la Comunitat Valenciana 2017-2021, no solo se incluye la financiación de los monitores flash.
También se facilitan los monitores continuos de glucosa a 360 pacientes con situaciones más complejas, menores y adultos, portadores de bombas de insulina y que a pesar de ello tienen un control difícil, debido a la inestabilidad de su diabetes.
“Gracias a nuestra experiencia colaboramos con el Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social en la futura y muy próxima dispensación de los monitores flash de glucosa para todas las personas con diabetes tipo 1 que opten por esta tecnología”, ha explicado Ana Barceló.
Desde la Dirección General de Farmacia y Productos Sanitarios han avanzado que, en estos momentos, se ha aprobado su financiación a nivel estatal y con los mismos criterios que en la Comunitat.
Además, en el Consejo Interterritorial, los representantes de las comunidades autónomas y del Ministerio estudian ampliar la financiación, priorizando el acceso progresivo a esta medida, para los siguientes grupos de población: Pacientes con discapacidad visual o limitaciones funcionales graves que les imposibilite realizar punciones digitales, o con trastornos funcionales cognitivos que les impida expresar la situación de hipoglucemia, también en caso de hipoglucemias frecuentes, mujeres gestantes o como mejora del control preconcepcional.
Educación terapéutica Otra acción encaminada a mejorar la atención a las personas con diabetes es la elaboración y desarrollo del programa de educación terapéutica, dirigido a personas con esta enfermedad, familiares y cuidadores. La finalidad es conseguir dotar a las personas de los conocimientos y habilidades para mejorar su estado de salud y su calidad de vida, pues es conocido que las personas que más saben acerca de su enfermedad viven más y mejor.
La educación terapéutica en diabetes, además de mejorar el control de la diabetes y la calidad de vida, contribuye a la sostenibilidad de los recursos públicos ya que gracias a los autocuidados se consiguen mejoras de salud con un ahorro en fármacos y en el coste de las complicaciones, al necesitar menos medicamentos y evitar las complicaciones, ha explicado la consellera.
Además, se han realizado acciones de colaboración con la Conselleria de Educación, Investigación, Cultura y Deporte para contribuir en la formación de los profesionales de la educación sobre las necesidades de las niñas, niños y jóvenes en su etapa escolar. De este modo, se ha conseguido mayor implicación de estos profesionales en los cuidados y detección de problemas así como un respuesta más rápida y adecuada.
Por otra parte, a través del ‘Pla Bé’ la conselleria estimula la práctica de hábitos saludables y, en colaboración con diversos ayuntamientos, promueve la práctica de actividad física gracias a los convenios de colaboración suscritos.
La Conselleria ha iniciado también el cribado automatizado en las personas con riesgo de diabetes que desconocen que la presentan, para así hacer un diagnóstico precoz y permitir actuar antes de que la enfermedad tenga consecuencias.
Francisco José Pomares, especialista en Endocrinología y Nutrición del Hospital Universitario Sant Joan de Alicante, y coordinador del Plan para la Asistencia Integral al Paciente Diabético en la Comunidad Valenciana, explica que este año, el lema del Día Mundial de la Diabetes es ‘La diabetes concierne a la familia’: “Con ello se pone el foco en el papel de las familias en los cuidados que necesitan estas personas, el soporte que ejercen ante las adversidades de la diabetes y el modelo de ejemplo para promover y mejorar los hábitos saludables”.
En palabras de Pomares, el papel de la familia es clave para facilitar el control de la diabetes y apoyar a las personas, tanto a los adultos como a la población infantil y juvenil. “La familia es modelo de hábitos saludables, permite transmitir entre generaciones el legado de la dieta mediterránea, priorizando el consumo de alimentos de temporada y proximidad, cocinados con aceite de oliva, y facilitando la convivencia en torno a la mesa”.
La familia ofrece también el estímulo para la motivación en la práctica de actividad física y, en ocasiones, actúa de cuidadora, ayudando y contribuyendo a administrar los tratamientos prescritos y a realizar los controles necesarios. “La familia es el primer soporte al que recurren los pacientes ante las adversidades y por ello han de conocer cómo dar respuesta a las necesidades que pueden surgir”, ha concluido el experto.
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