– El president destaca que el Consell está recuperando y reseteando las políticas industriales que la Generalitat puso en marcha en los años 80
València. El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha señalado que el modelo económico valenciano se asienta sobre la diferenciación, la calidad, la innovación y la productividad, una “vía valenciana”, que, según ha manifestado, debe basarse también en los pilares de la internacionalización y la apertura.
En este sentido, el jefe del Consell ha considerado “fundamental” situarse en la globalización “como mayores de edad a todos los efectos”, y es por ello que ha asegurado que la Generalitat está “absolutamente alineada” con los planteamientos de la Unión Europea en esta materia, como se evidencia con la visita a València de la comisaria de Comercio, Cecilia Malmström, el próximo viernes 25.
Puig ha participado en un coloquio con directivos y empresariado organizado por la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD), donde ha afirmado que la Comunitat Valenciana está recuperando su tradición de aperturismo en la cultura empresarial, y ha añadido que la “hipoteca reputacional” de anteriores gobiernos “no puede empañar el momento valenciano”.
En un acto al que también han asistido el conseller de Hacienda y Modelo Económico, Vicent Soler, y el de Economía Sostenible, Sectores Productivos, Comercio y Trabajo, Rafa Climent, el jefe del Consell ha felicitado a empresas y trabajadores por su esfuerzo, que ha generado un crecimiento real del 3,2% en 2017 en la Comunitat, la creación de 190.000 nuevos empleos en esta legislatur, y un aumento de las exportaciones del 18,2% en dicho periodo.
Puig, que ha defendido que gracias al trabajo de “miles y miles de empresas” la Comunitat Valenciana está recuperando “la confianza y la credibilidad”, ha hecho hincapié en la necesidad de aumentar los esfuerzos del papel público en apoyo de la economía.
Así, el president ha asegurado que el Consell está recuperando las políticas industriales que se pusieron en marcha por la Generalitat de los años 80, “reseteando” unos instrumentos que, como los institutos tecnológicos, deben “situarse en el siglo XXI”.
“La política industrial es fundamental”, ha recordado Puig, quien ha llamado a “generar un escenario favorable para el desarrollo tecnológico”, así como a “generar una transferencia permanente de tecnología” para el tejido empresarial, y, en especial, ha recalcado, para las pymes.
También ha manifestado para ello el interés del Consell en apostar por la educación para mejorar la formación de los trabajadores, tanto en la universidad como en Formación Profesional, por la innovación empresarial, con la recuperación de las inversiones en I+D+i y en los institutos tecnológicos, y por la mejora de las infraestructuras.
En este último aspecto, Puig ha recalcado la existencia de un “déficit histórico” de inversiones del Estado en la Comunitat, que en 2017 fue la última autonomía en inversiones por habitante. “No es una cuestión de rivalidad entre territorios; es un problema de ausencia de racionalidad en la distribución de inversiones”, ha concluido.
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