VALÈNCIA, 14 (EUROPA PRESS)
La consellera de Agricultura, Mireia Mollà, ha defendido la necesidad de abordar “un debate responsable sobre el precio de la alimentación” ante el contexto actual de inflación y ha abogado por que “cualquier iniciativa de una cesta básica asegure precios justos para el productor y productos frescos de proximidad”.
Mollà ha calificado de “interés general” la garantía de precios justos y asumibles para las familias en materia de alimentación, frente a la escalada de costes que “golpea directamente a las necesidades más básicas de la vida”. “El problema más grande es que no se está garantizando el precio al productor”.
Así lo ha expuesto en la apertura de una jornada sobre el funcionamiento de la cadena alimentaria en la que han participado el conjunto de entidades agrarias (AVA-Asaja, La Unió, COAG, UPA, Comité de Gestión de Cítricos y Federación de Cooperativas Agroalimentarias) y del sector empresarial y distribuidor a través de Fedacova y Asucova, detalla la Generalitat.
En su intervención, Mollà (Compromís) ha apostado por “una mayor transparencia que especifique el coste añadido de cada eslabón, en aras de una cadena alimentaria más fuerte y madura y de una alimentación saludable y de proximidad a un precio justo”.
Durante la mesa redonda, representantes de las entidades sectoriales han expresado sus puntos de vista y han coincidido en que conviene propiciar unas condiciones de mercado adecuadas para todos los actores que intervienen en el proceso.
La jornada ha contado con la directora de la Agencia de Información y Control Alimentarios, Gema Hernández, que ha explicado los detalles de la modificación de la legislación sobre el funcionamiento de la cadena alimentaria. Este cambio permite a las comunidades autónomas introducir instrumentos de gestión como la Agencia Valenciana de Información y Control (AVICA), centrada en extremar la vigilancia y la inspección en las operaciones par.
“Contar con un instrumento de estas características supone un paso muy importante de cara a lograr un mejor funcionamiento del mercado que redunde positivamente en todos los eslabones que conforman la cadena alimentaria, a fin de que cada uno de ellos pueda obtener una remuneración justa por su trabajo, sin olvidar tampoco la necesidad de satisfacer de forma adecuada a los consumidores”, ha resaltado el secretario autonómico Roger Llanes.
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