VALENCIA, 5 (EUROPA PRESS)
La Unió Llauradora ha cuantificado en una primera estimación las pérdidas ocasionadas por el pedrisco de los últimos días en la comarca de la Vall d’Albaida en más de 1,6 millones de euros. Por su parte, la superficie total de cultivo damnificada por las tormentas es de entre 6.000 a 8.000 hectáreas.
El cultivo más perjudicado es el del caqui, con daños en unos cuatro millones de kilogramos y unas pérdidas de un millón de euros. Otro cultivo con afección importante es el de los cítricos con cerca de dos millones de kilos afectados y unas pérdidas de 400.000 euros. También se observan daños en viñas, olivos y almendros, pero “con producciones escasas y un valor menos significativo”, según ha indicado la organización agraria en un comunicado.
El pedrisco ha afectado a las localidades de Aielo de Malferit, l’Olleria, Ontinyent, Agullent, Albaida, Montaverner, Atzeneta d’Albaida, Palomar, Carricola, Bèlgida y Otos. La afección es “muy desigual y va desde un 5% hasta un 80 o 90%”, ha apuntado. En concreto, ha precisado que la zona con mayores daños se sitúa en Agullent y Ontinyent, “con campos donde los daños son del 100%”.
La Unió ha señalado que el pedrisco es un riesgo meteorológico cubierto por el actual sistema de seguros agrarios y ha avanzado que va a solicitar a Agroseguro “la rápida peritación de los daños en las parcelas siniestradas”.
Del mismo modo, la organización pedirá una serie de medidas para los agricultores afectados. Entre ellas, ha mencionado ayudas directas, la condonación del IBI de las parcelas cultivadas y construcciones presentes en ellas, la bonificación de las cuotas de la Seguridad Social durante un año, el establecimiento de préstamos con interés subvencionado y también una serie de actuaciones y ayudas para las cooperativas comercializadoras afectadas.
La Unió ha señalado que, para el resto de las zonas de la Comunitat Valenciana donde no afectó el pedrisco, las lluvias han sido “positivas y sirven para paliar la situación de sequía en los cultivos de secano”, aunque ha lamentado que “los daños en algunos casos son irreversibles”.
Por ello, ha reiterado su demanda de ayudas directas para paliar las pérdidas por la sequía en cultivos como la uva de vinificación y de mesa, el olivar, almendro y los cereales, entre otros cultivos. También ha añadido que “resultan muy beneficiosas” para los cultivos de regadío, “donde permitirá ahorrar en riegos, limpiar los árboles ante la amenaza de posibles plagas y recargar acuíferos y embalses ya bastante mermados”. Igualmente, ha añadido que, para la ganadería, “servirán para regenerar los pastos muy mermados por la sequía y evitar así el aumento de los costes por los piensos para alimentación de los animales”.
- Te recomendamos -